Alberto Brunori, representante regional para América Central de la Oficina Regional para América Central del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), elevó un llamado al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo para que inicie un «diálogo amplio, participativo y transparente con una clara e integral perspectiva de derechos humanos».
El funcionario de la ONU enfatizó que una vez más ofrece su asistencia y apoyo a Nicaragua y que seguirán monitoreando la situación de los derechos humanos en el país.
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«Cualquier esfuerzo en el ámbito social es necesariamente ir acompañado de reformas políticas e institucionales, acordes con los estándares internacionales de derechos humanos que permitan a Nicaragua restablecer el equilibrio democrático. Avanzar hacia el pleno disfrute de los derechos civiles y políticos, incluyendo los derechos de las víctimas a la verdad, a la justicia, a la reparación y a la no repetición», dijo Brunori, durante la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) donde se abordó la situación de Nicaragua.
El representante para Centroamérica reiteró el llamado de la Alta Comisionada Michelle Bachelet al restablecimiento del Estado de derecho, la liberación de todas las personas detenida arbitrariamente, la reinstalación de los partidos políticos que fueron disueltos y el cese de todo acoso contra activistas, políticos, periodistas y defensores de derechos humanos. «Hacemos un llamado a que Nicaragua restablezca la cooperación multilateral», aseveró.
El representante de dijo que el principio de pluralismo político es fundamental para el ejercicio del derecho a la participación política, pero que esto «quedó claramente limitado de cara al proceso electoral impidiendo que muchas y muchos nicaragüenses tuvieran voz y votos en el mismo», en alusión al encarcelamiento de los aspirantes presidenciales.
