La opositora Karen Lacayo necesita con urgencia una intervención quirúrgica para poder salvar su rodilla izquierda, la cual sufrió una severa lesión el 24 de septiembre cuando intentó pasar el muro fronterizo de Estados Unidos.
La opositor, de 44 años, originaria de Masaya y que actualmente se encuentra en Tijuana, México, refirió a Artículo 66 que el médico que la está atendiendo le informó que su pierna la puede perder porque las arterias de la rodilla izquierda están «desbastadas».
«Tengo entres tucos la rodilla, luego de pegar en una roca cuando caí del muro fronterizo entre México y Estados Unidos. Antes que se me salga el líquido necesito ser operada», refirió muy preocupada la también hermana del preso político Edward Lacayo, conocido como la «Loba Feroz».
Según Lacayo, la operación que necesita tiene un costo de 6,500 dólares, más medicinas y gastos de hospital. «Estoy pidiendo ayuda para poder recaudar y que me puedan operar lo antes posibles. No quiero perder mi pierna o que quede inútil para siempre», dijo.
La hermana de la «Loba Feroz» descarta por el momento poder cruzar a Estados Unidos, porque manifestó que su prioridad es la operación de su rodilla. «La operación urge, porque puedo perder mi pierna, por el momento no seguiré intentando pasar a Estado Unidos, porque estando inmóvil no pudría avanzar ni dos pasos», declaró.
«Le doy gracias a mi Dios porque esto es la voluntad de Él. Así lo quiso Dios; voy a tener paciencia, hasta que Dios decida cuándo pueda reunirme con mi esposo y mi hijo», expresó optimista Lacayo.
Para la expresidenta la Asociación de Familiares de Presos Políticos (AFPP), la situación que enfrenta en estos momentos es muy triste, ya que no ha podido ver a su esposo y a su hijo, los que sí pudieron pasar a Estados Unidos.
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«Cuando cruzaron —a Estados Unidos — mi hijo y mi esposo, yo sentí un alivio porque ya estaban fuera de peligro, pero también me sentí triste porque yo quedé sola aquí (en México). Solo le pedía a Dios que me ayudara, que me enviara ángeles, y gracias infinitas a Dios porque encontré a muy buenas personas que me están brindando su amor y su apoyo incondicional», mencionó entre lágrimas Karen Lacayo.
No puede regresar a Nicaragua
Karen Lacayo salió de Nicaragua el 17 de junio, junto a su esposo y su hijo. Llegaron a México el 20 del mismo mes. En una reciente entrevista con este medio de comunicación, la opositora contó que la decisión la tomó por las constantes amenazas, asedio y persecución que sufría por la Policía y paramilitares.
«Salí de Nicaragua a las tres de la mañana. Fue dura la decisión de dejar a mi familia, pero tenía que hacerlo porque mi vida corría peligro, únicamente por exigir la libertad de mi hermano —Edward Lacayo— y la de todos los presos políticos».
Estando en México, intentó en dos ocasiones pasar a suelo norteamericano, pero fracasó. El 21 de septiembre, las autoridades policiales de Estados Unidos, los trataron con violencia y los deportaron al país azteca, luego el 24 del mismo mes lo volvió a intentar, pero se lesionó su rodilla.
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En cuanto a la posibilidad de regresar a Nicaragua, Lacayo asegura que es «imposible», pues su vida corre peligro en este país. «No puedo regresar a Nicaragua porque me secuestrarían o me desaparecerían. Gracias a Dios en México estoy legal, tengo una visa humanitaria por un año. En el nombre de Dios, cuando logre cruzar a Estados Unidos no me deporten», explicó.
Desde el exilio, Lacayo expresó que seguirá exigiendo la libertad de todos los presos políticos y demandando justicia para Nicaragua. Si usted desea paoyarla para su operación, puede hacerlo contactándola en su red social de Facebook: Karen Lacayo.
