PEN-Chile, organización que aglutina a poetas, ensayistas, novelistas, periodistas, bloqueos, entre otros, se pronunció para denunciar el irrespeto a los derechos humanos que sufre Nicaragua, esto después de la nueva arremetida de la administración Ortega-Murillo que ha dejado prisioneros a 16 opositores más, entre ellos cuatro candidatos presidenciales.
El comunicado de condena llega también por el aumento de la represión contra la prensa independiente y por la aplicación de leyes punitivas contra opositores nacionales. «Los arrestos de periodistas y directores editoriales son la manifestación de una represión grave sobre la libertad de expresión, ya puesta en peligro con la adopción en octubre de 2020 de la ley contra los ciberdelitos. Calificada como “ley mordaza”, esta amenaza con 6 años de cárcel a las personas que difundan “información falsa”, dando al gobierno la potestad de callar arbitrariamente las voces opositoras y hacer desaparecer la prensa independiente y libre», detalla el escrito.
Además, «la organización integrada por poetas, ensayistas, narradores, periodistas, profesores, editores, traductores y blogueros, expresa su gran preocupación y profundo rechazo frente al arresto en Nicaragua de cuatro precandidatos presidenciales, de líderes de la sociedad civil y 30 periodistas y dueños de pequeñas editoriales, acusados de traición y lavado de dinero al amparo de la Ley 1055 adoptada en diciembre pasado», al mismo tiempo que denuncian el trasfondo de esta “Ley de defensa de los derechos del pueblo” pues aseguran que criminaliza como «conspiración, injerencia extranjera, terrorismo y desestabilización» a cualquier acto de protesta cívica en demanda de libertad y elecciones libres.
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Culminan haciendo referencia al poema que escribió la poetisa nicaragüense Gioconda Belli, titulado «Agua», resaltando que en Nicaragua no habrá paz hasta que se acaben las mentiras y el engaño, en alusión al «guion inventado» del orteguismo para intentar sembrar el terror en la nación. Insisten en que están del lado de los ciudadanos que luchan por la libertad y democracia de la nación.
Distintos organismos internacionales se han suma a la petición de libertad para los presos políticos, lo que sentaría un precedente para que realmente haya muestra real de que en Nicaragua se pueda dar un proceso relativamente limpio en las eventuales elecciones del siete de noviembre. Hasta el momento la inhibición de candidatos y la cancelación de personalidades jurídicas no abonan a crear esas garantías mínimas. Por el contrario, ha habido un recrudecimiento de las amenazas, hostigamiento y represión contra la oposición.
Gracias PEN-Chile. Ojalá otras filiales latinoamericanas hagan lo mismo. Mientras más condenas se sumen menos legitimidad tiene esta dictadura.