El Colegio Teresiano, Centro América, Calasanz y Pureza de María suspendieron nuevamente su modalidad de clases presenciales por reportes de casos positivos de COVID-19 en padres de familia, estudiantes y maestros. La medida apuesta por proteger la salud de la comunidad estudiantil y evitar posibles contagios.
En el Colegio Calasanz el sábado, cinco de junio, las autoridades de esa institución informaron de un estudiante de sexto grado de primaria con síntomas del virus y la decisión fue de suspender la modalidad presencial a los estudiantes de primaria a partir de este martes, ocho de junio. Los alumnos se reintegrarán a recibir su curso académico en el centro el lunes, 21 de junio. La dirección solicitó a los padres de familia que si algún alumno tiene síntomas relacionados al COVID-19 esto les sea informado de inmediato y si algún familiar es positivo a coronavirus que también sea notificado para así tomar medidas.
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En el colegio Centro América las clases en línea serán únicamente para el séptimo grado B, grupo uno, esto debido al contagio de un padre de familia y se mantendrá con esa medida hasta el cinco de julio.

El Teresiano en una circular informó que varios padres de familia de primero a tercer grado reportaron positivo a COVID-19 por lo tanto el colegio ha decidido cambiarse a modalidad virtual desde este ocho de junio extendiéndose por 21 días, pero luego se conoció de más casos en el centro educativo y por lo tanto han decidido pasar a dicha modalidad hasta el final de semestre.
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Aprovecharon para dar indicaciones a los padres de familia sobre la pandemia de no realizar reuniones con grupos mayores a 10 personas y el uso de mascarilla constante, resaltando la importancia del núcleo familiar para prevenir más contagios.
Desde el el 18 de marzo de 2020 que se informó del primer caso de forma oficial en Nicaragua el calendario escolar se ha visto afectado, mayormente los colegios privados a diferencia de los públicos que se rigen por las políticas del Estado.
El reporte del Ministerio de Salud (Minsa) que comprende del primero al ocho de junio resalta que hubo 181 nicaragüenses afectados por COVID-19 confirmados, cifras que van en ascenso desde hace mes y medio.