La cifra de personas contagiadas por COVID-19 en Nicaragua presenta un incremento con relación a los meses anteriores. En lo que va del abril de 2021, el Ministerio de Salud (Minsa) pasó de reportar los frecuentes 50 casos en siete días a 63 nuevos pacientes infectados en la última semana que comprende del 20 al 27 de este mes.
El aumento de contagios coincide con las alertas de especialistas independientes del país y organismos mundiales de salud pública que advertían un posible repunte tras la Semana Santa.
Sin embargo, la institución insiste que desde mediados de octubre de 2020 solo se reporta un fallecido en siete días. Con estos nuevos datos, el país acumula de manera oficial 6,898 casos confirmados y 182 fallecimientos a consecuencia del virus desde el 18 de marzo de 2020 a la fecha.


En contraste, el independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 registra un total de 13,806 personas contagiadas y 3,055 muertes desde que se conoció del primer caso el 18 de marzo de 2020. Los especialistas señalan que los casos superan los cien en una semana y los fallecimientos alcanzan los diez.
Contra toda recomendación, el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene su habitual hermetismo y centralización de la información sobre la pandemia y la aplicación de la vacuna contra el virus; por el contrario, promueve las actividades masivas que llegan a superar las tres mil celebraciones en un fin de semana.
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Varios centros escolares han tomado la decisión de cerrar sus puertas y continuar con clases virtuales, debido a la detección de casos positivos en los colegios. También, recientemente, el Departamento de Estado de los Estados Unidos recomendó a sus ciudadanos que no viajaran a Nicaragua por la limitada atención médica frente a la pandemia del COVID-19 y el incremento de la violencia.