El más reciente informe sobre la libertad religiosa de la Organización No Gubernamental (ONG) católica «Ayuda a la Iglesia Necesitada» – una fundación papal creada en 1947 – ratificó que Nicaragua es un país donde las libertades religiosas y de culto están seriamente comprometidas debido a la represión gubernamental emprendida por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
«Las violaciones más importantes (en América Latina) a la libertad religiosa se producen en naciones con un historial cuestionable de respeto a los derechos humanos y la democracia, entre ellas Cuba, Nicaragua y Venezuela» , subraya la ONG católica.
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El organismo adscrito a la Santa Sede indicó que los regímenes totalitarios que existen en países como Nicaragua han manifestado su agresividad contra la Iglesia católica cuando los obispos han criticado «la corrupción y las iniciativas políticas y sociales que entienden que son perjudiciales para el bien común» .
En el caso de Nicaragua, señala que obispos, curas y sacerdotes; así como templos y propiedades eclesiásticas han sido atacadas por partidarios del régimen y órganos de seguridad del Estado por proteger a la población civil que protesta contra el Ejecutivo de Daniel Ortega desde abril de 2018.
«En este clima explosivo, la Iglesia católica ha intentado mediar entre el gobierno y la oposición, sin éxito, y posteriormente ha sido el objetivo de ataques y represalias por dar resguardo en sus edificios a los manifestantes exigiendo la liberación de los presos políticos» , remarca el informe sobre la libertad religiosa.
Negligencia con COVID-19 y manipulación religiosa
El informe manifiesta que mientras la Iglesia canceló los actos religiosos masivos propios de Cuaresma y Semana Santa en la primavera de 2020 con la intención de prevenir el contagio de coronavirus entre la feligresía; el régimen organizó festividades religiosas paralelas y fomentó la aglomeración de personas.
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«Con la aparición de COVID-19, el gobierno no logró prestar atención a los signos de la pandemia, por ejemplo, los servicios públicos continuaron funcionando normalmente, lo que permitió al virus propagarse. La vicepresidente animó a los servicios religiosos durante la Semana Santa; por el contrario, la Conferencia Episcopal llamó a realizar actividades limitadas y tomó medidas para prevenir infecciones» , destaca el organismo eclesial.
Perspectivas «sombrías» bajo el régimen
El informe de Ayuda a la Iglesia Necesitada sobre la libertad religiosa 2021 constata que el país vive bajo graves violaciones a derechos humanos y que las perspectivas bajo la Presidencia de Daniel Ortega son sombrías debido al deterioro del derecho fundamental a vivir la fe sin restricciones ni acoso.
«En el contexto de una profunda crisis sociopolítica; un pastor evangélico y su familia fueron asesinados, miembros del clero fueron atacados, acosados y perseguidos, mientras que sacerdotes extranjeros vieron canceladas sus visas» , puntualiza el documento.
También se reitera que tanto la Iglesia como organismos defensores de derechos humanos han remarcado el clima de «violencia y miedo» que impera en Nicaragua.
«La situación de este derecho fundamental (libertad religiosa y de culto) se ha deteriorado visiblemente en Nicaragua y las perspectivas para el futuro son sombrías» , finaliza el informe.