La vicepresidenta y vocera del régimen, Rosario Murillo, nuevamente se despachó calificativos y amenazas contra la oposición nicaragüense a las puertas de los posibles comicios generales en noviembre de 2021, descalificando además, a la administración de la expresidenta Violeta Barrios de Chamorro y los siguientes gobiernos liberales.
«Recordemos quién privatizó la educación, quién privatizó la salud, quién privatizó las propiedades del pueblo nicaragüense, solo recordemos un poquito; eso es odio, eso es indiferencia, eso no es cristianismo, no es fraternidad, por eso decimos con odio, con indiferencia, nunca más; con crímenes atroces que demandan castigo, nunca más y nunca más la impunidad», dijo Murillo este lunes, 1 de febrero, a semanas de mostrarse incómoda con la posibilidad que Cristiana Chamorro Barrios se convierta en candidata a la Presidencia de Nicaragua.
Mientras se refería a las vacunas contra el COVID-19 que serán regaladas a Nicaragua por ser un país pobre, la vocera justificó que el país es un «pueblo empobrecido por la desgracia que representa el odio. La insolidaridad es fruto del odio, y aquí vivimos un periodo de ceguera, un periodo de indiferencia, un periodo largo que no reconoció el derecho de los seres humanos, de todos, a tener salud, educación, vida, esperanza», manifestó la coordinadora de comunicación del régimen con 14 años en el poder.
A su vez, reiteró su advertencia a la oposición, recordándoles que «los crímenes atroces no quedarán sin castigo», delito que utiliza para referirse a las protestas sociales de 2018. «Ni separados, ni divididos por ese odio destructor, pero sí reconociendo que los crímenes de odio, los crímenes atroces no pueden quedar sin castigo», indicó, asegurando que Nicaragua es un «pueblo ejemplo del compromiso de la voluntad de uan cultura de paz».
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«Luchando para derrotar la pobreza y en eso, no solo tenemos experiencia, sino credibilidad porque hemos avanzando contra la pobreza, a pesar de la delincuencia terrorista, criminal que quiso destruir todos los proyectos sociales, los hospitales, centros de salud; a dinamitar, e incendiar las escuelas, los centros técnicos, imagínense qué clase de amor es ese, imagínense qué pueden proponer, una Nicaragua de paz y bien, qué pueden proponer si lo que querían era destruir como destruyeron, incendiar todo. Nos conocemos, sabemos quiénes son y no tienen perdón de Dios», advirtió.
En su habitual llamada telefónica, se despidió con nuevos epítetos a la oposición que se prepara para enfrentar a Daniel Ortega en unas eventuales elecciones generales. «Con amor todo vencemos. Con amor que es más fuerte que cualquier mediocre, miserable y vulgar forma de odio», dijo en irritado tono, la vicemandataria Murillo.
No vale la pena hacer comentarios sobre las estupideces de esta señora
La Rosario Murillo esta llena soberbia , pero no capacidad intelectual, ni muchos menos ganar un cero en la ecuacion de Al Judaismo.