Félix Maradiaga, miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), afirmó este miércoles, siete de octubre, que podrían sumarse a las demandas de los presos políticos por su libertad, que en este momento realizan una huelga de hambre.
«Dentro de la Unidad Nacional, estamos preparados para sumarnos a la huelga. Probablemente lo que más convenga sea un ayuno prolongado para proteger la vida de muchas personas, sobre todo la vida de los presos políticos. No podemos permitir que los presos políticos se inmolen» manifestó Maradiaga en entrevista a Artículo 66.
Familiares de presos políticos dieron a conocer recientemente, que el día 30 de septiembre más de 50 presos iniciaron una huelga de hambre por los maltratos, hacinamiento, malas condiciones higiénicas, aislamiento en celdas, trato inhumano y degradante a los que son sometidos y por las altas penas imputadas por delitos que no han cometido.
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Al menos tres presos políticos que se encuentran recluidos en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como «La Modelo», decidieron coserse los labios con hilos de nailon en otra acción que incluye su huelga de hambre indefinida.
«No queremos a ningún hermano preso político muerto. Todavía nosotros estamos llenos de luto y dolor por la muerte de Eddy Montes, y le pedimos a los presos políticos que no se inmolen», indicó Maradiaga, sin dar mayores detalles alegando que los mecanismos se está abordando de manera privada con familiares de presos políticos.
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Por otro lado, invitó a desconocer «absolutamente» las iniciativas de ley que impulsa el régimen de Daniel Ortega, mientras no estén respaldadas en los derechos humanos fundamentales y universales.
«Desconocer absolutamente ese intento draconiano de registrarse como agente extranjero», señaló Maradiaga en referencia al anteproyecto de Ley de Regulación de Agentes Extranjeros que pretende controlar los fondos de las Asociaciones, Organismos no Gubernamentales, y otras entidades.
«En Nicaragua el primer agente extranjero es Daniel Ortega y su familia que fue financiada por los soviéticos en los 80, financiado por (Muamar) el Gadafi, por Cuba y por Venezuela, así que si Daniel Ortega se registra como agente extranjero en Nicaragua, entonces lo podríamos pensar», apuntó el politólogo.
A su vez, hizo extensiva el «desconocer el concepto de noticia falsa». «Esos artículos de esa ley draconiana lo que tratan es crear una especie de posverdad donde aquí no exista transparencia y realidad de lo que se reporta», añadió.
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Los anteproyectos provocarían «más hambre, más desempleo, y demuestra que el régimen en su locura, en su actitud, de espaldas al pueblo, no tiene ni ninguna idea, ni ningún plan de darle a Nicaragua la posibilidad de una prosperidad incluyente», advirtió.
Maradiaga también reiteró que no están dispuestos a participar en el proceso electoral de noviembre de 2021, mientras el régimen mantenga presos políticos, con leyes represivas y sin reformas electorales. «Si no hay garantías de la libertad de los presos políticos y garantías de que los medios de comunicación podrán ejercer su labor libre, la Unidad Nacional no estaría dispuesta a ir a elecciones», apuntó el politólogo.
“Mire, estoy arriesgando mi vida para forzarles a cambiar esa situación”, señala el reo, y la dictadura responde: “¿Y qué?”
Una huelga de hambre sólo puede ser un instrumento de la lucha, si el violador de leyes y derechos y la víctima tienen juntos una última, todavía existente base común; como por ejemplo el respeto por la vida y la integridad física. Si ese respeto humano y moral falta, la huelga es un arma sin filo; el régimen no demuestra la más mínima muestra de ese respeto; no le importa en absoluto la salud o la vida de sus víctimas.
Entonces tendremos como resultado único imaginable que los reos en huelga se auto dañan y no van a lograr nada. Van a salir peor, enfermos o muertos algunos. La dictadura alegre: “¡Unos enemigos menos!”
Si gente de afuera lo apoyaría “por medio de una ayuna prolongada” es ridículo; no arriesgan nada, es meramente simbólico y no impresiona a nadie tampoco, especialmente no a los y las cínicas en el poder. Sean creativos y creativas y desarrollen una estrategia que duele a ellos yu a ella, una que impacte en la conciencia pública.
Este señor todavía la está pensando, es de actuar y es ahora que se debe hacer
Hay que reconocer que Maradiaga es un buen dirigente. Aunque en las condiciones actuales es difícil hacer protestas.