La vicedictadora de Nicaragua, vocera del régimen y primera dama de Nicaragua, Rosario Murillo, arremetió nuevamente este seis de octubre contra los ciudadanos y grupos de oposición que critican a su administración por violar los derechos humanos. La vicedictadora sigue acusándolos de promover el «odio» en la nación.
«Con el amor todo lo podemos, porque el amor todo lo vence. El amor es más fuerte que el odio, con el odio nunca más. Ya ayer (lunes) decíamos que el odio es aborrecimiento y hace aborrecibles a los que lo profesan, lo claman, lo practican. Eso es increíble, pero es la condición humana, pero la misión de los seres humanos es trascender, que venimos a este plano de vida a trascender, es decir, a superar esos sentimientos tóxicos, negativos, venenosos y lo más increíble de unos contra otros cuando tenemos que acercarnos», refirió Murillo, amparándose en su discurso de «amor» para atacar a todo el que intenta levantar la cabeza en desacuerdo con la dictadura.
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La segunda al mando en Nicaragua, quien se autollama católica y creyente de la Virgen, aseguró que continuarán promoviendo «justicia para todos» y más adelante reiteró «que odio nunca más. Aquí podemos decir que trabajamos para lograr una cultura de encuentro, de paz, de fraternidad. Todos hermanos, así queremos vernos, así queremos fortalecer la paz y el bien todos los días. Con odio nunca más». Murillo presenta esa cara mientras desde El Carmen ordenan asedio, intimidación, amenazas y persecución contra el que al menos pretenda organizarse fuera de sus filas.
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Un día antes, en su intervención del cinco de octubre, Murillo advirtió que «nunca más (permitirán) esas conductas criminales que solo han sabido generarse el desprecio de las mayorías de los nicaragüenses, nadie quiere saber de conductas no solo incorrectas sino criminales, inhumanas, tratos humillantes, degradantes crueles. Por eso decimos, nunca más y se los decimos a esas miradas turbias, esas miradas inyectadas de sangre, que se vean las manos, que se vean en el espejo a ver si encuentran otra cosa que no sea crímenes, criminalidad y afán de seguir entregando y ensangrentando a Nicaragua». La delegada del orteguismo se atrevió a calificar de «genocidas, asesinos y criminales» a la oposición. Desde el anuncio hace un mes de iniciativas de ley para controlar la información
No entiendo a esta señora, hablando de odio cuando ellos como gobernantes se han ensañado con las personas que no piensan igual que ellos…es triste la situación de mi querida Nicaraguita.