Los templos católicos de Matagalpa reabrirán sus puertas a sus fieles a partir del cuatro de octubre, bajo estricto protocolo de prevención ante la pandemia del COVID-19, así lo dio a conocer la Diócesis de ese departamento mediante un comunicado.
Desde el marzo de 2020, la Iglesia católica de Nicaragua adoptó medidas ante la pandemia, tales como condicionamiento para ingresar a las parroquias y celebrar las fiestas patronales, por lo que los templos se valieron de los medios de comunicación y redes sociales para difundir la celebración de la Eucaristía y demás ceremonias.
Luego de seis meses en un ambiente de confinamiento voluntario, las iglesias dieron a conocer el «protocolo de reapertura para la fase inicial de transición». Para evitar las aglomeraciones, la Diócesis de Matagalpa invita a que las misas vespertinas del sábado sean de carácter litúrgico dominical para mayores de 60 años.
Noticias relacionadas: Iglesia católica cancela las fiestas de San Jerónimo, pero dictadura de Ortega monta su propia celebración
En las entradas se colocará material para desinfectarse como alfombras empapadas en cloro, alcohol, entre otros. Además, se designará un único acceso al templo. Los fieles deberán guardar la respectiva distancia.
No habrá participación de monaguillos. El sacerdote contará con el apoyo de voluntarios que deberán hacer uso de las medidas de protección y orientarán a los que participen en las liturgias la entrada y salida del templo.


Los fieles tienen el deber de presentarse tiempo antes de iniciar la celebración para seguir el protocolo, deberán usar correctamente la mascarilla; preferible no llevar carteras u objetos no necesarios. Una vez que los lugares sean ocupados, no se permitirá la entrada de fieles.
La misa deberá durar una hora máximo y el sacerdote usará alcohol y mascarilla y dará la absolución general antes de cada Eucaristía. El coro se conformará por tres personas únicamente; no se hará uso de cantos, ni libros de lecturas para evitar contagios; el saludo de paz será con una reverencia a distancia.


Las hostias consagradas deberán estar en copones tapados, los fieles deben guardar distancia al momento de recibir la eucaristía, la que será entregada en las manos con la norma correspondiente. En caso de los servicios como bautizo o matrimonio, el número de participantes no puede ser mayor a 10.
A los menores de 15 años y mayores de 60, embarazadas y personas vulnerables se les invita a participar en los actos litúrgicos a través de las transmisiones virtuales. Las personas con síntomas de gripe, por ninguna razón deberán asistir a la parroquia.
Uh yo pensé que en Nicaragua todas las parroquias estaban abiertas con las medidas de higiene y protección que se usan en los supermercados o en las farmacias. Pero me equivoqué parece que el alimento y remedio al cuerpo es más importante que el alimento y medicina del alma que es la sagrada eucaristía y el colmo de la decepción es que si los consagrados obispos y sacerdotes tienen fe en el milagro de la transubstanciación, es decir que la hostia y el vino consagrados son realmente el Cuerpo y la Sangre de Cristo no se entiende porqué van a darlo en las manos a sabiendas que las partículas aunque sean microscópicas, pueden ser pisotedas o ultrajadas y son Dios mismo y si creen que es Dios mismo tampoco puede transmitir enfermedad alguna.
Sí alguien que lea mi mensaje conoce al obispo de Matagalpa de quien he tenido anteriormente una buena imagen, por favor tome captura a la pantalla y reenvíe esta opinión.
Primero se dice que se invita a los mayoresbde 60 a asistir a las misas vespertinas de los sábados, que es igual a la del domingo. Más adelantebse dice que estos mismos ancianos, al igual que los niños menoresbde quince añosby mujeres embarazadas mejor participen de la misa de manera virtual. En esto hay contradicción.
Por otra parte se estipula que a los casamientos y bautizos solo deberán asistir 10 personas. Me parece una cantidad muy pequeña. Ni que fueran tan chiquitos los templos para aceptar solo 10 personas para poder guardar la distancia.