Han pasado dos años del asesinato de Marcelo Mayorga, conocido como “el hombre de la tiradora”, víctima de un disparo en la cabeza, el 19 de junio de 2018, cuando se defendía del ataque de paramilitares y policías en el denominado “Plan Limpieza”, ejecutado por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Este es el segundo año que sus hijos y esposa recienten su pérdida y que además no podrán estar juntos en el Día del Padre.
Mayorga procreó dos hijos con su esposa Auxiliadora Cardoze, con quien convivió 20 años, Marcelo de Jesús, de 20 años, y Ricardo Armando, de 12, ambos recuerdan a su padre como de un hombre “extraordinario”, con el que podían contar en cualquier momento. “Nunca tuve quejas de Marcelo, siempre fue un excelente padre, nunca dejó a sus hijos, ellos eran la prioridad en su vida” dijo en una entrevista para Artículo 66, Auxiliado Cardoze, hoy viuda de Mayorga.
Por su parte, Marcelo de Jesús Mayorga, hijo del “hombre de la tiradora” refirió que todos los días piensa en su papá, “no tengo malos recuerdos de él, (Marcelo Mayorga) en mi mente está todo lo bueno que él hizo por su familia, antes de ser un padre fue un amigo», dijo con aplomo.
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«En el Día del Padre hay un gran vacío, porque él ya no está con nosotros, ya se cumple tres años que no celebramos el Día del Padre, porque cuatro días antes de esta celebración el gobierno lo mató”, lamentó.
“Mi padre siempre está conmigo”
Marcelo Mayorga era un tradicional miembro de la cofradía de San Jerónimo. Su hijo mayor (del mismo nombre) cuenta que todos los años lo acompañaba a cargar la imagen venerada por el pueblo católico de Masaya, sin embargo todo cambió luego del asesinato de su progenitor, ya que nunca más compartiría con él está tradición religiosa.
“El año pasado (2019) fue duro celebrar San Jerónimo sin el acompañamiento físico de mi padre, pero sentía que él iba conmigo, a diario siento que él me acompaña, cada celebración de San Jerónimo marcará una huella imborrable, porque fueron momentos lindos que viví al lado de mi padre”, recuerda con pesar.
El 19 de junio, a dos años del asesinato de Marcelo Mayorga, sus dos hijos visitaron su sepultura, cuya muerte aún sigue impune y los culpables siguen libres y amparados bajo una ley de amnistía que pretende “perdonar” todos los crímenes de lesa humanidad ejecutados por la dictadura de Daniel Ortega.
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“Los responsables de la muerte de mi padre son Daniel Ortega y Rosario Murillo, los cuales tarde o temprano pagarán por sus crímenes”, dijo Marcelo “Junior”, quien también afirmó que seguirá demandando justicia por el asesinato de su papá y por todas las víctimas del régimen.
El mes de junio del 2018 quedará como uno de los más obscuros en la historia de Masaya, porque fue cuando murieron más de 10 ciudadanos a manos de la dictadura orteguista. Algunas de las víctimas eran padres de familia, como el caso de Darwin Potosme “Comandante Fafo”, asesinado el 17 de junio mientras se protegía de los ataques de paramilitares. Pese a que los familiares han exigido justicia, lo que reciben por respuesta de parte de la dictadura es asedio y represión.