Después de laborar por 15 años como internista en el Hospital Manolo Morales, en Managua, la doctora Martha Bendaña Morales, a eso de las ocho de la mañana, recibió su carta de despido sin ninguna justificación. La doctora Bendaña, de 46 años, aseguró a Artículo 66 que su despido se debe a que expresó que no estaba de acuerdo con el manejo que hace el Gobierno de Nicaragua ante la situación del COVID-19.
«Me llamaron a las ocho de la mañana de Recursos Humanos me dieron la carta y la tuve que firmar, la orden viene desde arriba del SILAIS (Sistema Local de Atención Integral en Salud)-Minsa o del mismo El Carmen», en alusión de la residencia donde viven los Ortega Murillo.
«Fuimos cuatro los médicos despedidos del Hospital Manolo Morales. Nos despiden por el simple hecho de que firmamos una carta de pronunciamiento de que no estábamos de acuerdo con el manejo que se le estaba dando a la pandemia del COVID-19 en los hospitales de Nicaragua», explicó la internista.
Nota relacionada: Régimen orteguista despide sin justificación a cirujano general del Hospital Manolo Morales
Además, agrega que ellos como médicos consideran que lo que hacía el Gobierno Ortega-Murillo «no era lo correcto porque no había cuarentena, no teníamos equipo de protección, la gente se estaba muriendo y no reportaban los datos fidedignos, confiables, sino que inventaban lo que ellos (Minsa) querían que el pueblo supiera».
En ese sentido aseguró que a diario fallecían de 7 a 15 personas por COVID-19, un dato que bota los informes del Ministerio de Salud y además detalló que ese hospital solo cuenta con seis respiradores mecánicos.
Asimismo, la internista destacó que la carta que firmó era respaldada por más de 700 médicos que denuncian la negligencia del Gobierno de Daniel Ortega frente al COVID-19, que ya ha dejado cerca de 1,200 fallecidos y más de cinco mil casos confirmados según el reporte del Observatorio Ciudadano de COVID-19, aunque la dictadura a través del Ministerio de Salud (Minsa) reconoce cerca de 1,500 casos y solo 55 decesos desde que inició la pandemia en el país.
La médica asegura no estar arrepentida por denunciar lo que en Nicaragua realmente sucede y se está queriendo ocultar y mencionó que «los médicos tenemos que tener la misma postura, nuestro cumplimiento es ayudar ahora a los pacientes con COVID-19, independientemente que este Gobierno se oponga, nosotros tenemos que alertar a nuestros pacientes». Igualmente, la doctora Bendaña sostiene que su contrato no tenía fecha límite, pues era un contrato indefinido.
Finalmente, la internista expresó su preocupación ante la irresponsabilidad del gobierno y su negativa de decretar una cuarentena nacional para prevenir más el contagio del virus en Nicaragua. «Si seguimos así sin hacer cuarentena, sin tomar las medidas más estrictas y que los médicos estemos atados de manos y no continuemos la lucha, la pandemia en este país va a terminar peor. Probablemente el virus pueda durar más de seis meses».
La doctora Bendaña también se solidarizó con sus colegas quienes también fueron despedidos: el doctor cirujano, Ignacio Molina; la doctora internista, Tanielisa Mungía y el doctor cirujano hepatobiliar, Sergio López, contra quienes el régimen arremetió y los despidió del Hospital Manolo Morales.
Por favor médicos, renuncien todos!!! Los exponen al contagio x falta d equipos, los pisotean y los humillan!!! Uds no son ignorantes!!! Renuncien y expongan las razones ante todos los organismos internacionales. Denuncien la manipulación de la dictadura con la información, y no permitan q la bruja asesinica y el moclimandante los humillen como q uds fueran cualquier basura. Háganse respetar!!! Tomen en cuenta q habemos muchos q no tenemos trabajo fijo y estamos sobreviviendo desde abril 18. Ya paremos todo en este país para demostrarle a los asesinos q no los queremos más
Si renuncian todos quienes van atender a los enfermos. Si te enfermaras querías que alguien mire por tu salud. No es esa la manera de resolver el problema.
Hay que parar el País! Renuncien todos! Como es posible que esa pareja de imbeciles analfabeta y criminales que se han atornillado en el poder los manden a destituir? Seres pequeños de mente reducida piensan que son superiores a todos los nicaragüenses solo porque “ahorita” están sostenidos por el poder que dan las armas y los corruptos aduladores y serviles que les chupan las botas!
Ojalá renuncien médicos y enfermeras. Arriesgar la vida por un grupo de basuras sandinistas, que no ofrecen ninguna garantía a la población que los montó en el poder, ¿por qué no dejar a las ratas en su propio veneno?
Cuando sean cada vez menos, entonces si puede el pueblo reaccionar, ordenarse, educarse como debe ser, y sacarán del poder a quienes han matado a su gente y les harán pagar todo el daño que le han hecho a sus conciudadanos