La titular del Ministerio de Salud (Minsa), Martha Reyes, leyó este martes el «reporte semanal» sobre la situación del coronavirus en Nicaragua. Según las cifras oficiales, el número de muertes subió a 17, ya que en la semana del 12 al 19, se reportaron nueve fallecimientos más. Igualmente, el número de casos confirmados se elevó de 25 a 254. Destacaron que la cantidad de recuperados es de 199. Es decir, que la cifra de casos confirmados en total llegó a 279.
El Minsa afirmó que desde que se registró el primer caso de coronavirus en el país se han atendido a 470 personas, pero calló sobre los casos confirmados por Costa Rica de nicaragüenses contagiados, que fueron detectados en la frontera y también guardó silencio sobre las denuncias de entierros nocturnos. «Neumonía grave o atípica, infartos o afectaciones pulmonares» forman parte de la lista de supuestas causas de esas muertes, pero los familiares de las víctimas aseguran que fue por COVID-19.
Noticia relacionada: Manejo del COVID-19 por la dictadura de Ortega tiene «trazos criminales»
Pese al incremento de las cifras por coronavirus en Nicaragua, Rosario Murillo dedicó su monólogo para intentar reducir el impacto, apelando a que hay enfermedades o causas que han provocado más muertes en este año a nivel mundial, incluyendo suicidios y accidentes de tránsito, pero enfatizó que por aborto ha habido más, al mismo tiempo que aprovechó para atacar a la oposición, señalando que «no tienen valores y que solo persiguen un afán protagónico».
El ciudadano Miguel Ángel Lúquez, de 69 años, habitante del barrio José Esteban Corea, de la ciudad de Rivas, falleció a las cuatro de madrugada de este martes, tras nueve días padeciendo gripe y fiebre, y luego cansancio y dificultades para respirar. Todos los síntomas del COVID-19, aunque los funcionarios del Ministerio de Salud (Minsa) se negaron a hacerle la prueba porque «no era necesario», según denunció una de sus hijas, a través de Facebook.
Denuncia que cuando su padre estaba con fiebre y problemas para respirar llamaron al Minsa, los médicos llegaron pero dijeron que «no era necesario» hacerle la prueba de #COVID19 y que prestaron una cuchara para revisarle la garganta. #DerechoAInformar https://t.co/pavfjk4Hie
— Artículo 66 (@Articulo66Nica) May 19, 2020
El acta de defunción que le entregó el Minsa, dice que los motivos del deceso fueron tromboembolismo pulmonar, cepsis (una enfermedad en la cual el cuerpo tiene una respuesta grave e inflamatoria a bacterias u otros microorganismos) y diabetes. «Si no fuera COVID-19, no nos hubieran mandado a cuarentena y no hubieran venido a fumigar la casa. Ya basta de tantas mentiras» escribió la muchacha en tono indignado.
Noticia relacionada: Minsa eleva cifra de muertos por coronavirus en Nicaragua a 17
Fuentes médicas del Sistema Local de Atención Integral en Salud, Silais-Matagalpa, confirmaron a Artículo 66 que en el Hospital Escuela César Amador Molina hay 10 personas en estado grave y tres médicos sospechosos de COVID-19. Una fuente hospitalaria explicó que “los pacientes COVID en el hospital, solo son pacientes graves”. Según este informante, los contagiados con coronavirus son de los municipios de Ciudad Darío, Sébaco y Terrabona, del departamento de Matagalpa.
Ante esa situación, las autoridades de Salud, desde hace una semana, decidieron suspender las clases prácticas a los estudiantes que cursan la carrera de Medicina en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua con sede en Matagalpa. De acuerdo con los alumnos, la explicación que les dieron fue que la medida es como «una forma preventiva por todo lo que está pasando».
