La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, catalogó la masacre en la comunidad mayangna como una acción «macabra» y repudió el comunicado de la Policía Nacional en el que asegura que solo hubo dos indígenas asesinados, mientras los comunitarios afirman que fueron seis. Para el Cenidh, la institución al servicio del régimen orteguista trata de «minimizar» la situación.
El organismo señaló que mantienen comunicación con Gustavo Sebastián Lino, presidente del Gobierno Territorial Mayangna Sauni As, quien ha dicho que “la comisión de la Policía Nacional no ha llegado a la comunidad de Alal en Bosawás y que están inconformes con el comunicado emitido por esa institución”.
Con respecto a la nota de prensa publicada por la Policía en la que solo se informa de la muerte de dos personas, el líder territorial, Gustavo Lino, asegura que ellos sostienen el número de 6 asesinados, la desaparición de 10 indígenas y la quema de al menos 15 viviendas. pic.twitter.com/daZGCoQdvq
— Cenidh (@cenidh) January 30, 2020
Por otro lado, insistió en que “el gobierno de Daniel Ortega es el causante (de esa acción) por tolerar y encubrir a las personas que han invadido las reservas indígenas” y remarcó que no se explica cómo el Estado que tiene el deber de velar por la seguridad de esos comunitarios “haya permitido el ingreso de ese grupo de más de 80 colonos armados que invadieron sus tierras, quemaron casas, asesinaron y secuestraron a las personas”.
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Asimismo, el defensor de derechos humanos Gonzalo Carrión, quien es miembro del colectivo Nicaragua Nunca +, aseveró que esa masacre solo fue posible por la complicidad de las instituciones públicas como la Policía y el Ejército de Nicaragua.
El @ColectivoNunca condena la masacre contra una comunidad indígena del Caribe, donde asesinaron a 6 comunitarios y secuestraron a otros 10. “Esa es una acción que solo es posible con la permisividad del Estado”, declaró Gonzalo Carrión. #Artículo66 #DerechoAInformar pic.twitter.com/MOgu9MxbsY
— Artículo 66 (@Articulo66Nica) January 30, 2020
Carrión manifestó que la masacre es reciente y nueva pese a que desde hace años han recibido amenazas e invasiones a sus tierras y hasta masacres que han cobrado la vida de indígenas. También, reveló que han tenido la oportunidad de conocer cómo los han venido asesinando, “cuya ejecuciones, crímenes son posibles por la permisibilidad del Estado, esto es un patrón de una sistemática y grave violación de derechos humanos como privar de la vida de forma violenta”.
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Carrión enfatizó en que la instituciones públicas como la Policía Nacional y el Ejército de Nicaragua son cómplices de estas masacres. “La institución castrense que tienen un batallón que en esas comunidades le llaman beco -batallón ecológico-“. Por otro lado, insistió en que estas instituciones han justificado el asesinar a personas bajo el alegato que son “delincuentes comunes”, cuando son personas consideradas enemigas del gobierno.
