Una mezcla de miedo y ansiedad son algunos de los síntomas que presentan las mujeres que han sufrido violencia física, acoso y hostigamiento en las redes sociales. La activista y líder universitaria Madeleine Caracas, quien se exilió en Costa Rica en mayo de 2018, fue una víctima más de los “troles fanáticos del régimen”, quienes explícitamente le decían cómo la iban a violar.
Durante varios meses el temor y la tensión se apoderaron de su mente, ya que a partir de la crisis sociopolítica que inició en abril de 2018, la mayoría de denuncias de jóvenes activistas y manifestantes eran de agresiones sexuales que primero se realizaban en las redes sociales y luego trascendían a lo físico.
“Me ha dado mucha ansiedad, he tenido que lidiar con esto, he tenido que lidiar en la forma en la que me dirijo en los espacios públicos (…) en muchas ocasiones me autocensuré en las redes”, expresó la líder universitaria quien afirma que en Nicaragua hay una cultura machista y misógina.
Desde que Caracas se vio involucrada en el activismo, las amenazas aumentaron. “Una de las cosas que más me afectaron cuando yo aún seguía en Nicaragua, no era el miedo a la Policía; era de que si me encontraba un fanático en la calle podría concretar estas amenazas las cuales describían explícitamente en los mensajes que he recibido”.
Según la estudiante de 22 años, no ha tenido la oportunidad de tratarse con un especialista de la salud mental, pero a través de su arte ha exteriorizado su sentir y este problema social, que según los especialistas afecta constantemente a las mujeres por la naturalización del problema. También ha recibido talleres de seguridad digital que pone en práctica para proteger sus cuentas y comunicaciones.
“Violencia digital no es reconocida como violencia”
Para Evelyn Flores, miembro de la Red de Mujeres Contra la Violencia (RMCV), el acoso y hostigamiento en las redes sociales no es visto como violencia por las autoridades en el país; sin embargo, los hombres utilizan esta vía para ejercer dicha acción y luego concretarla.
“No solamente se queda en el ámbito digital, sino que muchas veces conocen donde está la víctima que cuando se la encuentran la agreden. O sea que pasa de una amenaza virtual a una agresión física o sicológica. Esto es peligroso porque prácticamente se expresa la violencia machista, todas estas nuevas manifestaciones de agresión de distintos tipos hacia las vidas y los cuerpos de las mujeres. Hay mucha misoginia y mucha crueldad hacia las mujeres”.
La defensora aseguró que este comportamiento en los hombres no es cuestionado ni señalado por la sociedad; sin embargo atacan a la mujer que está siendo víctima. Destacó que a partir de abril de 2018, han recibido muchas denuncias de activistas, jóvenes y defensoras de derechos humanos que sufren agresiones en las redes sociales.
Un reciente estudio realizado por la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) destaca que el 57.6%, de 323 mujeres encuestadas, experimentó una situación de violencia relacionada con la tecnología antes de abril de 2018; pero las cifras aumentan después de la crisis y pasan a 73.1%.
El 33.3% de mujeres aseguran que han sido acosadas u hostigadas más de cinco veces y 33.8% dos o tres veces.
Código Penal contempla sanciones
Julio Montenegro, abogado miembro de la organización Defensores del Pueblo, aseguró que el Código Penal contempla sanciones contra hombres que ejercen violencia contra las mujeres, pero por el contexto y cultura del país no son tomadas en cuenta.
Montenegro declaró que desde abril de 2018, hay muchos casos de mujeres que han sido abusadas sexualmente por uniformados o civiles armados, que en varios de los testimonios las amenazas se realizaron en las redes sociales.
En marzo de 2018, la magistrada y presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Alba Luz Ramos propuso tipificar como delitos el ciberacoso y ciberbullying; sin embargo esto no ocurrió.
La magistrada Ramos, en ese momento, resaltó que ambos problemas sociales eran cada vez más frecuentes en la sociedad nicaragüenses, principalmente contra las mujeres. “Laceran la dignidad, denigra y humilla, en especial a las mujeres. Los hombres no se escapan, pero siempre está dirigido de forma especial a las mujeres, y se utiliza como referencia para denigrar a las mujeres”.
46.6% de agresiones se realizan por WhatsApp
El estudio realizado por Funides destaca que el 46.6% de mujeres es acosada por WhatsApp, el 42.4% por Messenger y el 24.2% por llamadas telefónicas.
Las plataformas más utilizadas por los agresores es Facebook con el 86.0%, Twitter 33.1%, Instagram con el 9.3% y Youtube con 6.4%. En el caso de las situaciones de violencia las amenazas encabezan la lista con 74.34%, seguida de los insultos con 63.04%, publicaciones falsas 56.62%, información personal 42.99% y otras situaciones 23.39%.
De todas las amenazas recibidas, los ataques contra la integridad de la víctima alcanza el 40.3%; el 28.8% agresiones contra los familiares y el 26.9% contra la vida de las mujeres.
Para Funides, “los resultados de esta investigación son un punto de partida para la reflexión colectiva sobre la creación de Políticas de Estado que incluyan estrategias de sensibilización, prevención, atención y mitigación ante estas violencias; ya que la creación de una Ley especializada no puede ni debe ser la única alternativa para lidiar con la violencia de género a través de la tecnología”.
Finalmente, las defensoras de los derechos de las mujeres y abogados recomiendan buscar ayuda especializada y no normalizar la violencia digital para evitar acciones que lamentar. Asimismo, orientan tomar medidas de seguridad digital para evitar el acoso.