A través del viceministro de Exteriores Serguéi Riabkov, el gobierno de Rusia reconoció este jueves a Jeanine Áñez como nueva presidenta interina de Bolivia tras la renuncia del ahora expresidente boliviano Evo Morales. Sin embargo, el gobierno de Vladimir Putin aclaró que “claramente será considerada gobernante de Bolivia hasta que se resuelva con las elecciones la cuestión de un nuevo presidente”.
«Nos dimos cuenta de que, cuando fue nombrada para este cargo, no había quórum pleno en el Parlamento, por lo que vemos aquí algunos puntos que, por supuesto, tenemos en cuenta», agregó Riabkov.
El gobierno ruso, a pesar de que reconoció a Áñez como presidente interina, manifestó su descontento por lo ocurrido en Bolivia y se suma a los países de izquierda que consideran que Evo Morales fue víctima de un golpe de Estado. «Percibimos todo lo que precedió al cambio de poder (en Bolivia) como acciones que en realidad equivalen a un golpe de Estado (…) esto nos recuerda una vez más que ciertas fuerzas utilizan métodos que van más allá de las normas legales para resolver sus propios problemas políticos», afirmó el viceministro.
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Hasta ahora Rusia se suma a los países como Colombia, Guatemala, Brasil, Estados Unidos y Reino Unido, que reconocen a la funcionaria como nueva presidenta de Bolivia, tras tomar el poder el 12 de noviembre, luego que Morales huyera por cometer fraude electoral.
En su cuenta oficial de Twitter el secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, aplaudió el reconocimiento a Áñez y mostró su disposición de trabajar con Bolivia, «mientras preparan elecciones libres y justas lo antes posible».
I applaud Bolivian Interim President Jeanine Anez for assuming this role at a time of great responsibility where there is a need to restore order and maintain civilian leadership in #Bolivia.
— Secretary Pompeo (@SecPompeo) November 14, 2019
«Aplaudo a la presidenta interina boliviana, Jeanine Ánez, por asumir este papel en un momento de gran responsabilidad donde es necesario restablecer el orden y mantener el liderazgo civil en Bolivia. En medio de esta transición democrática, es vital que todas las partes protejan la democracia y se abstengan de la violencia», agregó Pompeo.
La acción del presidente Putin podría generar ruido a los gobiernos dictadores como Cuba, Venezuela y Nicaragua, con quienes han mantenido relación con el país ruso. De esta manera las dos grandes potencias del mundo (Rusia y Estados Unidos) definen su posición en cuanto a la convulsión política en América Latina.