El diputado orteguista Gustavo Porras recibió la respuesta y aval de la Comisión Especial de Carácter Constitucional para proponer como candidatos únicos a Darling Carolina Ríos Munguía, como procuradora de Derechos Humanos, y a Adolfo José Jarquín León, como subprocurador, ambos fieles del orteguismo y miembros de la JS. Ríos Munguía fue coordinadora de la Juventud Sandinista y actualmente se desempeña como viceministra de la Mujer.
Noticia relacionada: Los JS, los nuevos defensores de los Derechos Humanos en Nicaragua
En sus redes sociales, se vende como “antiimperialista”, “antiyanqui” y “enemiga” de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Esta ficha de la dictadura reemplazaría a Corina del Carmen Centeno Rocha, quien renunció a ese cargo el 18 de octubre de este año, mientras Jarquín León ocuparía el puesto Adolfo Jarquín Ortel, quien falleció el 24 de agosto.

En su afán de vender que Nicaragua volvió a la normalidad en medio de la crisis sociopolítica que vive el país desde abril de 2018, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo inició las labores de instalación de adornos, árboles, trineos y luces navideñas en las principales avenidas de Managua, parques y rotondas. En total, colocarán cerca de 700 adornos, cumpliendo de esta manera los caprichos de la mujer de Ortega a costas de los impuestos de los ciudadanos de esta nación.
Esta idea es calificada por las madres de los asesinados por la tiranía como “una falta de respeto a su dolor”. El festín navideño costó el año pasado a los nicaragüenses más de 155 millones de córdobas, según una investigación realizada por Artículo 66, que también incluía la edificación de más 50 altares a la Purísima.

La Asociación de Familiares de Presos Políticos (AFPP) convocó para este mes de noviembre a una jornada de manifestaciones en la que demandarán la libertad de los más de 130 prisioneros del régimen orteguista. La campaña la denominaron “Navidad sin presos políticos” y con ello planean realizar un plantón en las cercanías del residencial El Carmen, donde vive la familia dictatorial. La vicepresidente de ese organismo, Martha Alvarado, madre del reo Melkissedex López, aseguró a Artículo 66 que “nosotros como familiares hemos estado en la lucha desde que nuestros hijos fueron secuestrados ilegalmente; no hemos descansado y ahora con lo que viene la Navidad estamos desesperados por nuestros presos políticos”.
Noticia relacionada: La estrategia política de apaciguamiento
El sitio web The Travel calificó a Nicaragua como uno de los 10 países más peligrosos para hacer turismo por la delincuencia, las “protestas violentas” y la “deficiencia en la atención médica”. Además, señaló que Estados Unidos ha tenido que sacar a algunos de sus diplomáticos por su seguridad, haciendo referencia a la decisión que tomó ese país cuando las manifestaciones estuvieron en su punto más álgido en julio de 2018, tres meses después del levantamiento pacífico de los ciudadanos, el gobierno norteamericano retiró a su personal “no esencial” de Nicaragua. De igual manera, pidió reconsiderar viajar al país por la ola de crímenes y las acciones del régimen contra los opositores.
Miembros del colectivo de excarcelados políticos y artesanos denunciaron ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) asedio policial, paramilitar y de turbas orteguistas cuando el domingo, tres de noviembre, organizaron una feria en la Catedral de Granada para vender productos azul y blanco elaborados por los excarcelados de la tiranía. La exrea política Erika Molla señaló que han sido víctimas de las amenazas y persecución por parte de los agentes del régimen.
“Fuimos amenazados de muerte por la Policía de Granada, paramilitares y simpatizantes del gobierno, por lo cual decidimos retirarnos del lugar. Nos dijeron que todo el colectivo iba a ir a la cárcel por atentar en contra del Estado de Nicaragua. Estamos preocupados y tenemos por nuestras vidas, porque lo único que hacemos es generar dinero para ayudar a nuestras familia”.
Todo ese dinero gastado en adornos navideños como parte de un programa de propaganda Nazi-Fascista sale de los impuestos que pagamos los nicaragüenses, hay que evitar oxigenar a estos Asesinos llamando a un paro Nacional Indefinido declarado por los trabajadores el gran capital es socio y cómplice de estos Criminales y jamás llamarán a paro ellos son parte de hacer creer que aquí todo está normal.