La Asociación Madres de Abril, integrada por familiares de personas asesinadas por el régimen de Daniel Ortega en el marco de las protestas sociales surgidas a partir del 18 de abril de 2018, rechazaron con “indignación y dolor” la propuesta de justicia presentada por la dictadura. En conferencia de prensa, las madres expresaron que “el gobierno está incapacitado para aplicar justicia”.
La madre de Álvaro Conrado, un símbolo de la resistencia estudiantil, Liseth Dávila, aseguró que rechazan “que sea la policía o cualquier institución del Estado y la denominada Comisión de la Verdad, creada por diputados afines a la dictadura, quienes impartan justicia en los crímenes a partir del 18 de abril”.
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“Tenemos derecho como víctimas, reconocidos por el marco jurídico internacional, ejerceremos nuestros derechos a la verdad, justicia, reparación y no repetición como familiares de víctimas de los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Estado de Nicaragua, seguiremos exigiendo justicia sin impunidad”, enfatizó.
Además, la organización desconoció la representación de cualquier otra entidad en su nombre.Susana López, progenitora del estudiante asesinado durante el ataque a la UNAN-Managua Gerald Vásquez, aseguró que en el tema de justicia las madres de las víctimas son las únicas autorizadas para demandar. “Todo acuerdo en el tema de justicia debe ser aprobado por nosotras, no puede hablar nadie, las del dolor y el luto somos nosotras, nadie mas que nosotras puede sentir el dolor que parimos a esos chavalos”.
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En su comunicado las madres, hacen un llamado a que “todas y todos exijan en una sola voz el regreso antes del 19 de abril del 2019 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a través del Mecanismo de Seguimiento de Nicaragua (MESENI)”.
A la vez, están demandando que regrese al país, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) y la ampliación del Grupo de Expertos Interdisciplinarios (GIEI) para la investigación y documentación de los asesinatos y otros crímenes cometidos a partir del 01 de junio del 2018.
Es por eso que el régimen no quiere a las verdaderas víctimas en la mesa de negociación, porque no quieren aceptar a sus crímenes y que de los griten en la cara. Lo mismo pasa con la cuota de representantes que debe haber de campesinos y estudiantes, no quieren que les griten en su cara lo que realmente son: Asesinos y Criminales Genocidas.