La tarde de este primero de abril, la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia brindó una rueda de prensa en la que se informó que ante los hechos de violencia protagonizados por la guardia orteguista y simpatizantes sandinistas el fin de semana, enviaron una comunicación al representante del Vaticano, el nuncio apostólico, Waldemar Stanislaw, y el representante de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Ángel Rosadilla, para informarles lo ocurrido.
La representante de la Alianza Cívica Azahálea Solís aseguró que es necesario que regresen al país la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) para que puedan ser garantes de los acuerdos que se han firmado en dicha mesa de negociación.
“Es urgente para nosotros que vengan garantes internacionales. Por su experiencia hemos solicitado que sean nombrados garantes por su experiencia la CIDH y la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para rescatar la confianza en esta negociación”.
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La Alianza Cívica sigue insistiendo en que la dictadura orteguista debe de “dar muestras reales” de querer tener garantes internacionales de los acuerdos.
El sábado, 30 de marzo, la Unidad Nacional Azul y Blanco llamó a una “sentada nacional”, dicha protesta fue realizada en centros comerciales y espacios públicos, pero la Policía arremetió contra los manifestantes y un fanático orteguista disparó a tres personas en el centro comercial Metrocentro.
Ante estas agresiones y luego de firmar acuerdos con los que la dictadura se comprometía a garantizar las libertades y los derechos a la reunión pacífica, la Alianza Cívica protestó ante el incumplimiento de lo acordado.
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“El sábado se miró que no fue en sí una manifestación, ya que en Metrocentro no se puso un solo pie en la calle y se vio como el jefe policial ordenó que arremetieran con la gente que estaba sentada hasta en el piso”, dijo el miembro de la Alianza Cívica, Carlos Tünnermann.
Hasta el momento, el régimen de Daniel Ortega no ha aceptado el acuerdo para nombrar a los garantes internacionales . La dictadura tampoco ha querido tocar el tema del adelanto de elecciones, factor que para la oposición es “indispensable”, a solo dos días de finalizar el plazo oficial de estas negociaciones que buscan encontrar una salida pacífica a la crisis que vive Nicaragua desde abril de 2018.
Felicidades Alvaro por tus reportajes, te conocí dando tus opiniones en IV Poder, y vi que sos un exelente periodista.