La Arquidiócesis de Managua emitió la medianoche de este sábado, 16 de marzo, un comunicado donde condena la represión ejecutada por la Policía orteguista contra manifestantes antigubernamentales en el centro de Managua.
El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, aseguró que los hechos represivos acontecidos la tarde del sábado evidencian la crisis nacional, que debe ser resuelta de modo “franco y efectivo”.
“La Arquidiócesis de Managua deplora y condena los hechos de la tarde del sábado, 16 de marzo en la ciudad capital que evidencian la necesidad de resolver con franca y efectiva responsabilidad la crisis nacional”, señala el comunicado.
La Arquidiócesis confirmó que dentro de los detenidos estaba el sacerdote diocesano Juan Domingo Gutiérrez Álvarez, vicario de la iglesia San Agustín de Managua; quien fue detenido ilegalmente por efectivos policiales mientras participaba del inicio de la manifestación opositora portando una bandera con los colores de la Iglesia católica.
“Entre los ciudadanos detenidos estuvo el presbítero Juan Domingo Gutiérrez Álvarez, vicario parroquial de la parroquia San Agustín en la zona pastoral central de Managua; quien al ser liberado, fue trasladado a la casa cural por el Nuncio Apostólico Waldemar Sommertag”, puntualiza el comunicado.
Brenes ausente
Pese a que el comunicado de la Arquidiócesis de Managua asegura que el arzobispo Leopoldo Brenes estuvo al corriente de la situación, lo cierto es que desde la detención del sacerdote Juan Domingo Gutiérrez Álvarez y su liberación, transcurrieron casi diez horas sin que las autoridades eclesiásticas de la capital se pronunciaran al respecto.
“El señor arzobispo cardenal Leopoldo Brenes estuvo atento al desarrollo de los acontecimientos y en comunicación con el Nuncio Apostólico a quien agradece sus gestiones por la liberación del presbítero Juan Domingo Gutiérrez Álvarez y demás ciudadanos”, subraya la comunicación oficial.
Finalmente, el arzobispo pidió que las negociaciones que se llevan a cabo entre una delegación del régimen y miembros de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y Democracia lleguen a resultados satisfechos por el bien del país.
“Esperamos que los lamentables sucesos exijan máxima y sincera voluntad en la búsqueda de soluciones efectivas y prontas, como lo deseamos todos los nicaragüenses”.