El presidente de Estados Unidos, Donal Trump está valorando el bloqueo a varios países del Tratado de Libre Comercio con República Dominicana y Centroamérica (CAFTA-DR), el cual fue firmado en el 2005 con seis naciones de Latinoamérica.
Entre los países que se está valorando un posible bloqueo a dicho mercado se encuentra Nicaragua, República Dominicana y El Salvador, a causa del avance de la política autoritaria y los lazos “cuestionables” entre estas naciones. Señalaron que este beneficio comercial es un apoyo a los “actores represivos en la región”.
El proceso de expulsión hasta el momento es valorado por altos funcionares del gobierno de Estados Unidos.
Este bloqueo no les impedirá a los países afectados vender sus mercaderías, pero estarían sujetos a aranceles más elevados.
Uno de los funcionarios estadounidense expresó al diario internacional El Nuevo Herald que “estamos muy preocupados con el avance de Nicaragua hacia el autoritarismo, y los lazos cuestionables de República Dominicana y El Salvador. Como Estados Unidos ha dejado en claro, no permitiremos que nuestros acuerdos comerciales, incluido el CAFTA-DR, se conviertan en una puerta trasera para beneficiar a economías que no respetan el mercado y son actores represivos en la región”.
El objetivo del CAFTA
Los antecedentes históricos de este tratado tienen como objetivo principal “apoyar la democracia y las reformas económicas después de años de guerra civil e insurgencias comunistas”.
Eric Farnsworth, vicepresidente del Consejo de las Américas en Washington declaró que es normal que se quiera expulsar a Nicaragua del acceso al mercado estadounidense por “haberse salido del camino democrático”.
Noticia relacionada: Dictadura orteguista ha perpetrado crímenes de lesa humanidad, según el informe final del GIEI
El régimen de Daniel Ortega fue señalado en el reciente informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) por crímenes de lesa humanidad, que incluye a varios funcionarios públicos e instituciones estatales como cómplices de la represión.
Este documentos de más de 400 páginas es acompañado de vídeos que muestran directamente a la Policía orteguista en conjunto con paramilitares reprimiendo a los manifestantes con armas de guerra como AK-47 y Dragunov.