Después de una larga espera y con el tráfico estancado en la zona oeste de la capital, Managua, a familia presidencial inauguró el paso a desnivel de Las Piedrecitas, con un breve mensaje de Daniel Ortega.
Ortega impuso una cadena de radio y televisión, a través del ente regulador de las telecomunicaciones Telcor, para brindar “un mensaje a la nación”, por lo que se esperaba que el dictador se refiriera a las sanciones de Estados Unidos contra su mujer, la primera dama y vicepresidenta Rosario Murillo y su asesor en espionaje Néstor Moncada Lau. Ortega prefirió guardar silencio y limitarse a inaugurar la obra con un corto mensaje, que fue aplaudido por una raquítica portátil de jóvenes de las estructuras partidarias del oficialismo.
Ortega calla sobre sanciones contra Rosario Murillo y afirma que Nicaragua no se paralizará, lo que lamentablemente muestra una desconexión con la realidad y/o un desconocimiento de los fundamentos de la economía.
— Eduardo Marenco (@ejmarenco1) 29 de noviembre de 2018
Ortega, que en sus mensajes anteriores hacía referencia al “injerencismo” del “imperio yankee”, sólo cortó la cinta y se retiró, dejando un gran vacío a la población que espera desde el martes, 27 de noviembre, una respuesta sobre las tres estocadas que en un solo día propinó la administración de Donald Trump contra la dictadura nicaragüense, responsable de los asesinatos de más de 530 nicaragüenses, durante las protestas registradas después del 18 de abril.
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Los dos últimos sancionados por Washington pasaron a engrosar una “selecta” lista de corruptos, narcotraficantes y criminales internacionales y son señalados directamente por Estados Unidos de ser los ejecutores de la masacre contra los ciudadanos que ejercieron su derecho a la protesta cívica en Nicaragua.
Por su parte la primera dama Rosario Murillo, al terminar la inauguración, habló en su acostumbrado monólogo frente a sus medios de comunicación y también se limitó a elogiar la obra, que según dijo, “fue construida por Dios”.
Ortega inauguró el paso a desnivel de Las Piedrecitas, y durante su breve discurso dijo que “este es el regalo navideño para los nicaragüenses”. La obra costó a los contribuyentes de Managua más de 14 millones de dólares, que pasaron a engordar la deuda de la alcaldía capitalina.
pues esta bonito , los vale que hiceron algo ,eso no se les niega , pero la cagaron por asesinos
y no hay dinero ni obras que tapen eso.