El pago por canastas navideñas es el rubro que más sangra al país en temporada de fiestas de diciembre. De las 105 instituciones, 39 registran ese desembolso, que suma un total de 111,162,797.99 córdobas, según detectó el equipo de investigación de Artículo 66 en el portal oficial Nicaragua Compra.
El Ministerio de Salud (Minsa) es la institución que más fondos destina a la entrega de canastas. Según el reporte de la ejecución presupuestaria, esa institución destinó para el 2018 un monto superior a los 44 millones de córdobas.
Sin embargo, el reporte de gasto del Minsa incluye el rubro “canastas navideñas” en 52 ocasiones y aparece el gasto desde los primeros meses del año. Lo que siembra dudas de las compras que realizan bajo esa descripción en realidad sean una fachada.
«La persona encargada en las áreas de adquisiciones deben de ser claros en los descriptores que deben de colocar porque rinden cuentas sobre ello. Este PAC no es solo para uso interno de ellos, sino para potenciales proveedores, pero también para la ciudadanía. Yo si encuentro canastas navideñas que se entregan en enero, que se entregan a mediados del año, digo, aquí hay algo raro. Navidad solo tenemos una y está en una fecha determinada. Entonces, hay que colocar de manera correcta los descriptores, porque esto, por publicidad y por transparencia funciona como mecanismos de rendición de cuentas para la ciudadanía, entonces puede dar lugar a malas interpretaciones sobre que estamos comprando cosas que no debemos de comprar», interpretó Valle.
Siguen sangrando al moribundo INSS
En segundo lugar, se encuentra el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS). Esa entidad dentro de todas las actividades solo reporta gastos en la entrega de paquetes para los trabajadores, pero la partida presupuestaria es de 20 millones de córdobas, es decir, más 610,000 dólares.
Precisamente, una reforma al Seguro Social fue el detonante para las protestas que sumieron al país en la profunda crisis vivida desde el 18 de abril. El Gobierno pretendía imponer ajustes a la tasa de cotización de trabajadores y empleadores y la reducción en un 5 % a los jubilados. Era uno de los golpes más fuertes que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo pretendían darle a la economía de los nicaragüenses, lo que generó una rebelión cívica que ha dejado, producto de la represión estatal, entre 327 y 545 asesinatos, de acuerdo con organismos internacionales y nacionales de derechos humanos.
Las finanzas de esa entidad están al borde de la quiebra, ya que ha acumulado una deuda, hasta 2012, de 600 millones de dólares, según estadísticas oficiales, pero a pesar esas dificultades financieras, la administración del INSS sigue sangrando sus fondos con las jugosas canastas.
Manuel Israel Ruiz, especialista en temas de seguridad social y exdirectivo de esa institución, señala que aunque la entrega de esas canastas pueda formar parte del convenio colectivo de esta entidad, «el INSS está en una condición que no le permite gastar cinco centavos en cosas que no sean fundamentales para el Seguro Social y la canasta navideña no es un asunto fundamental».
Ruiz sostiene que «el Seguro Social debe estar en una alta disciplina en sus gastos administrativos para ir administrando correctamente, porque una de las cosas que se ha dicho desde el 2013 es que debía tener un déficit y ahorita en el 2018 se espera que el déficit, según el Banco Central y los de (Ministerio de) Hacienda, va a ser superior a 5 millones de córdobas, aunque mi cálculo son de 3,000, pero sea 5,000 o 3,000 es un déficit muy complicado para el Seguro Social y pronostican que para el año 2019, el déficit del INSS va a ser de 8 millones».
Con la crisis, según el experto, entre abril y julio de 2018, se desafiliaron 103,000 nicaragüenses, una merma que representa el 11 % de los cotizantes que pagaban su seguro social antes de que iniciaran las manifestaciones. El cálculo de reducción es 261,000,000 de córdobas. Las cifras oficiales hasta la fecha resaltan que el INSS ha perdido 166,640 afiliados.
«En esta situación de dificultades financieras que el Seguro está viviendo, donde hay menos ingresos porque realmente se han desafiliado muchísimos trabajadores porque han perdido su empleo (…) debe preocupar una buena administración y no estar haciendo gastos que no tienen ninguna relación con el Seguro Social», recalcó Ruiz, quien también hizo énfasis en que si el Seguro Social gasta 20 millones, significa que cada canasta tendría un valor de aproximadamente 5,000 córdobas, pues el INSS tiene una planilla de 4,000 trabajadores.
Otra de las dependencias que destina una fuerte suma en canastas navideñas es la Asamblea Nacional con un monto superior a los 18 millones córdobas. El Poder Legislativo solo declara en su Programa Anual de Compras el gasto para canastas navideñas.