La aparente normalidad de Managua fue estremecida por los gritos de la caravana fúnebre que recorrió la capital. La caravana vehicular estaba encabezada por el féretro del joven de 16 años Matt Romero, otra víctima de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que fue asesinado por las balas de paramilitares y policías, durante la última marcha cívica que se realizó en Managua bajo el nombre de “Somos la voz de nuestros presos políticos”.
«¡Era estudiante, no era delincuente!, ¡Matt Romero Presente!», gritaban los compañeros de clases del adolescente, mientras acompañaban a sepultarlo en el cementerio Milagro de Dios, al sureste de Managua.
Los estudiantes, familiares y amigos del estudiante de secuendaria salieron en caravana vehicular, lloraron y exigieron justicia por el joven que recibió un disparo en el pecho, que afectó su corazón.

Esta brutal represión dejó un saldo de al menos 6 personas con heridas de bala, entre los que se encontraba el estudiante que estaba en cuarto año de secundaria en el colegio Rubén Darío.
El tío de Matt, entre lágrimas, dijo que su sobrino salía a las calles a manifestarse en contra de la represión y soñaba con una Nicaragua libre de la dictadura orteguista.

La noche del domingo operadores del Frente Sandinista intentaron ofrecer un ataúd a la familia buscando que estos señalaran a los autoconvocados de ser los responsables de la muerte de Matt, pero la familia desde el inicio señaló a la policía y a las turbas de paramilitares de ser los responsables de la muerte del joven.
La dictadura de Daniel Ortega no ha cesado de reprimir y encarcelar a los manifestantes que participan de las marchas y plantones azul y blanco que desde el 18 de abril se replican en toda Nicaragua. Con la muerte del joven Matt Romero, la cifra de asesinados, según el informe preliminar de la Asociación Nicaragüense Pro-Derechos Humanos (ANPDH), se eleva hasta 512 personas, muertas a manos de policías y paramilitares afines a la dictadura. Mientras que el régimen orteguista reconoce menos de 200 muertes.