Alexander Pérez Amador, mejor conocido como Alex, de 51 años, es un esteliano que desde que iniciaron las protestas en contra de la represión del régimen de Daniel Ortega, el pasado 18 de abril, decidió salir a las calles a demandar paz, justicia, libertad y democracia. El pasado 14 de agosto su decisión le costó su libertad, pues la Policía orteguista lo detuvo y ahora enfrenta acusaciones de crimen organizado, portación ilegal de armas y destrucción a instituciones públicas.
“El 14 de agosto, a eso de las 4:40 de la tarde, nos apresaron. Nosotros íbamos en una motocicleta y casi nos echaron encima una camioneta Hylux negra, no estaba rotulada pero iban agentes de la Policía. Ellos se bajaron y nos comenzaron a esposar, a él lo esposaron primero (…) En la acusación de la audiencia preliminar a mi papá le ponen que supuestamente, uno de los últimos detenidos en Estelí, Otoniel Espinoza lo involucra en actos delictivos y dice que se va a entregar, cuando fue la misma policía fue la que manipuló el Facebook de ese chavalo”, detalló Kevin Pérez, hijo de Alex, quien también fue detenido ilegalmente.
Pérez es abogado de profesión, laboró como defensor de derechos humanos para la filial de Estelí del Centro Nicaragüense Derechos Humanos (Cenidh) y también se dedicaba a sembrar sus tierras. La persecución en contra de Alex Pérez venía desde un mes antes de su detención. Kevin nos cuenta que en junio un grupo de agentes de la Policía llegaron a allanar su casa, sin ningún tipo de orden judicial, aduciendo que “ahí teníamos armas, rompieron la puerta y no encontraron nada, desde entonces nosotros contamos con un recurso de amparo”.
El día de la detención de Pérez, él y su hijo Kevin fueron llevados a la Estación Policial Boris Vega, lugar del que dejaron libre a Kevin después de 24 horas, pero a Alex un día después lo trasladaron a las celdas de Auxilio Judicial, mejor conocido como El Chipote. “Al momento de llegar a Operaciones nos bajaron de la patrulla y estaba el subcomisionado Rocket y mi papá le dijo ´ideay Rocket ¿sin orden judicial y sin nada?´, él no le contestó nada. Nos tomaron las huellas y nos pusieron en celdas a parte. En la mañana del 15 me llegaron a llamar y solo me dijeron que iba libre, no me dijeron el porqué él (mi papá) quedaba detenido, ni del porqué estuve preso, absolutamente nada y la motocicleta en la que nos trasladábamos se la quedaron ellos”, explica Kevin, quien pese a estar libre tiene mucho temor por la persecución que hay en su contra.
Detenido por protestar
El pecado para Alex Pérez fue ser “activo en las protestas”, según sus familiares, que lo describen como un hombre honesto, de muchas amistades y caritativo. Pérez se convirtió en miembro activo del Movimiento Azul y Blanco de Estelí y participó de los tranques en el traslado de heridos, además, apoyó a las familias consiguiéndoles el ataúd para sus caídos. Alex Pérez también brindó asesoría legal a ocho familias de Estelí que tienen presos políticos.
“Cuando los paramilitares llegaron a desalojar el tranque de la Trinidad, Estelí, mi papá le salvó la vida a un joven porque requería de atención urgente, necesitaba ser trasladado al Vivian Pellas y nadie se atrevía. Mi papá forma parte del Movimiento azul y blanco de Estelí, su labor era canalizar la ayuda de los ciudadanos. Cuando cayeron los primeros asesinados ayudó a conseguir el ataúd para las familias y también le tocó conseguir ambulancia para los heridos”, especificó Kevin Pérez.
Persecución en contra de la familia Pérez
Desde la detención de Alex Pérez su familia no tienen paz. Sus hijos han decidido dejar de sembrar la tierra, pues temen que en esos terrenos solitarios los lleguen a matar, además, están siendo constantemente perseguidos por agentes de la Policía. Kevin Pérez detalló que el viernes, 07 de septiembre, mientras pasaba consulta con su hija, en el centro de salud de Estelí, unos agentes sin explicarle nada se llevaron su motocicleta.
“Yo andaba en el centro de salud con mi hija porque ella tenía fiebre y la dejan internada, posteriormente, llego el viernes en la mañana a verla, pero cuando salgo de la visita mi motocicleta ya no estaba. Le pregunté a los CPF (guarda de seguridad) y me dijeron que la Policía se la había llevado porque la motocicleta tenía placa de Managua”, narró Kein Pérez, quien prefirió no ir a reclamar el abuso policial pues no confía en las autoridades de la Institución castrense, pero aprovechó la entrevista con Artículo 66 para denunciar que cualquier acto que se cometa con esa motocicleta es responsabilidad de la Policía.
La demanda de los familiares de Alex Pérez es que lo libertad porque aseguran que es inocente. Kevin Pérez, hijo de Alex, resaltó que exige su libertad porque la acusación que hay en su contra es “absurda” y “ellos saben que son mentiras todas esas acusaciones”.
Plantón por la libertad de Alex
Sus familiares y colegas defensores de derechos humanos, durante la audiencia inicial en contra Pérez, se plantaron este 11 de septiembre en las afueras del Complejo Judicial para demandar su libertad. Mujeres y hombres, con consignas y pancartas, exigieron que se liberen a todos los presos políticos, los cuales ya ascienden a más de 300 según los registros de organizaciones defensores derechos humanos de Nicaragua.
Marling Sierra, directora ejecutiva del Cenidh, reiteró que Alex es un defensor de derechos humanos y que no merece que se le esté criminalizando, esto en declaraciones a Radio Corporación.