[vc_row][vc_column][vc_column_text]Roberto Rivas Reyes, supuestamente ahora exmagistrado del Consejo Supremo Electoral (CSE) de Nicaragua, protegido por el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), habría renunciado al cargo en ese Poder del Estado, según lo informó la Organización de Estados Americanos (OEA), a través de una nota escueta publicada en su portal web.
Según la OEA, “el Gobierno de Nicaragua, reiterando su voluntad de continuar trabajando por el fortalecimiento de la institucionalidad, confirma la renuncia del Presidente del Consejo Supremo Electoral, Dr. Roberto Rivas, y está pendiente de las decisiones que conforme Ley corresponden adoptar a la Asamblea Nacional”, especifica el documento.
La Secretaría General de la OEA agregó que “la presente decisión del Gobierno de Nicaragua en el camino del mejoramiento del sistema electoral es apreciada como una señal hacia la recomposición de la confianza y la armonía democrática en el país”.
Rivas, fue señalado durante años como uno de los rostros más despreciables de la administración pública del país, por su desfachatez, los múltiples señalamientos de corrupción, enriquecimiento ilícito y varios fraudes electorales que facilitaron la permanencia ilegal y abusiva de Daniel Ortega, Rosario Murillo y toda la cúpula orteguista que se enquistó en el gobierno desde el 2007 hasta la fecha.
Consultada sobre esa decisión del régimen orteguista, la coordinadora nacional del Frente Amplio por la Democracia (FAD), Violeta Granera opinó que esa decisión es absolutamente extemporánea. “Lo debió hacer hace mucho tiempo y ahora lo hace por que tiene la presión de la gente en las calles, pero ya no nos interesa si Rivas renuncia o no. Quien debe renunciar es la dictadura Ortega-Murillo”.
“Lo que el pueblo de Nicaragua está exigiendo es que los Ortega Murillo renuncien ya. Después de un mes de masacres, este es el primer imperativo ético, moral y político. Por supuesto que la democratización implica un nuevo CSE que prepare condiciones para elecciones libres. Pero esos cambios vendrán después y no solo el de Rivas”, dijo la dirigente opositora.
El 22 de diciembre del año pasado, Rivas fue sancionado por Estados Unidos a través de la aplicación de la Ley Global Magnitsky, y a través de dicho mecanismo, incluido en una lista negra de criminales, narcotraficantes, corruptos y violadores de derechos humanos en el mundo.
El siete de febrero de 2018, la maquinaria orteguista en la Asamblea Nacional, en un intento por proteger a Rivas ante las presiones de Estados Unidos, le quitó todas las funciones en el CSE y se las pasó al vicepresidente de ese Poder de Estado, el también orteguista, Lumberto Campbell. Rivas, no obstante quedó con salario, escolta personal, vehículos e inmunidad como funcionario público.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
a Daniel, la Mocuana y toda su cámara de gobierno deben de renunciar, que no crea que tapando un huequito ya se soluciona toda la situación, degenerado ,asesino.