La presidenta departamental de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), Janireth Mendoza de Chamorro, denuncia que tiene más de dos años de asedio permanente por parte las fuerzas policiales del régimen Ortega-Murillo, situación por la cual algunos de sus familiares están resultado con serias afectaciones psicológicas.
Mendoza de Chamorro declaró a través de Articulo 66 que desde el 2018, cuando apoyó las protestas sociales, ha estado sometida a un constante asedio y hostigamiento por parte de efectivos policiales y por civiles fanáticos del régimen que se apostan frente a su negocio, afuera de su casa o la persiguen cuando se moviliza en su vehículo. «El acoso es tal, que ya está provocando afectaciones psicológicas en mi familiares más vulnerables como en mis hijos y mi mamá», denunció la dirigente opositora que reside en el municipio de San Carlos, del departamento Río San Juan.
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«Mis hijos viven nerviosos. Mi mamá, que es una señora de 80 años que perdió la vista y padece problemas cardíacos, vive angustiada, apenas se da cuenta que la Policía está asediándome, me llama llorando. Los policías actúan con crueldad», añadió la opositora.
«Desde abril 2018 no han dejado de asediarme por ser opositora al Gobierno. En fechas como abril o septiembre pasan vigilándome todo el mes. En lo que va de este año 2021, desde el dos de enero no han dejado de asediar todos los días. Los domingo llegan a mi casa y los días de semana se apostan frente a mi negocio y al negocio de mi hijo; la gente ya no quiere ni entrar por temor a represalia», aseguró Mendoza de Chamorro.
Según la denunciante, los policías que son enviados se dedican a intimidar con sus armas de fuego, «exhibiendo sus armas en actitud amenazante. En el día vienen los policías de celeste y por la noche los de uniforme negro».
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La dirigente de la Alianza Cívica relató que hace unos días fue invitada a un cumpleaños y cuando se dirigía a esa actividad familiar, a una comunidad cercana, efectivos policiales persiguieron el vehículo en el que se trasladaba acompañada por la cumpleañera y la detuvieron, la obligaron a bajarse del vehículo junto a su familia y el automotor fue ocupado por los efectivos policiales arbitrariamente y lo llevaron al depósito vehicular y les dijeron que para sacarlo de ahí debían pagar seis mil córdobas. «Ya no puedo ni salir a ningún lado porque me siguen y me lo impiden».
Además, aseguró que cada día, incluyendo este lunes ocho de febrero, envían en misión de asedio contra su familia entre cuatro y 10 efectivos, los que en ocasiones hasta se han dedicado a insultarla y hacerle señas obscenas.
La presidenta departamental de la Alianza Cívica aseguró que, incluso, con el propósito de afectarla económicamente, algunos dirigentes sandinistas han instado a sus militantes que no honren los créditos que tienen en sus negocios, que dejen de pagarle para ocasionarle perdidas económicas.