El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo continúa avanzando en sus proyectos de seguridad con la Federación de Rusia, enfocados principalmente en la Policía Nacional y el Ejército de Nicaragua.
Durante la doceava Conferencia de Representantes de Alto Nivel para Asuntos de Seguridad, celebrada en San Petersburgo, Rusia, una delegación nicaragüense, encabezada por Laureano Ortega Murillo, el hijo «predilecto» de la pareja dictatorial, se reunió con el general Nikolai Patrushev, Secretario del Consejo de Seguridad de Rusia.
En el encuentro, las dos naciones abordaron «los temas y proyectos de la cooperación bilateral entre Rusia y Nicaragua en materia de Seguridad y reconfirmaron los apoyos mutuos en todos los campos», según la información divulgada en los medios propagandísticos el sandinismo.
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Los nicaragüenses también se reunieron con funcionarios del Ministerio del Interior ruso, con el objetivo de «reforzar los lazos de colaboración» con la Policía, y con representantes del Servicio Federal de Seguridad de Rusia, para «fortalecer la cooperación con el Ejército de Nicaragua». Ambas entidades se encuentran al servicio y controladas en su totalidad por el gobierno sandinista y las han utilizado como su principal brazo represor contra la población.
De igual manera, los representantes de Ortega participaron en la tercera reunión multilateral del Grupo de Trabajo conformado por Nicaragua, Rusia, Cuba, Venezuela y Bolivia, donde reafirmaron sus «posiciones comunes para hacer frente al hegemonismo de Estados Unidos y sus aliados europeos».
Además de Ortega Murillo, los otros nicaragüenses que participaron en la conferencia para Asuntos de Seguridad fueron el comisionado general Zhukov Serrano, subdirector de la Policía Nacional; el coronel Álvaro Martín Peña Núñez, segundo jefe de la Dirección de Información para la Defensa del Ejército de Nicaragua, la subdirectora general del Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (TELCOR), Celia Reyes, y la embajadora de Nicaragua en Rusia, Alba Azucena Torres.
De otros países, estuvieron presentes Lázaro Alberto Álvarez Casas, ministro del Interior de Cuba, el mayor general José Adelino Ornelas Ferreira, jefe del Estado Mayor de la Comandancia de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y Hugo Moldiz, asesor del presidente de Bolivia.
Intenciones de reprimir
El pasado 28 de febrero, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo firmó acuerdos de cooperación con la Federación de Rusia, en materia de seguridad, principalmente para «actividad policial» y vigilancia a los ONG, lo que evidencia que las fuerzas represivas sandinistas refinarán en Rusia sus métodos represivos.
Ortega Murillo, al informar sobre los resultados de las reuniones con el enviado ruso, indicó que firmaron un «Protocolo de Cooperación» entre la Policía de Nicaragua y el Ministerio del Interior ruso, para los años 2024-2026», sin especificar sobre qué contiene ese protocolo.
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Además, señaló que suscribieron un acuerdo entre la Policía nicaragüense y el Ministerio del Interior ruso sobre «cooperación en el ámbito de recapacitación y superación profesional del personal en la esfera de la actividad policial».
Asimismo, el Chigüin Ortega detalló que firmaron un «Memorándum de Entendimiento» entre el recién resucitado Ministerio del Interior de Nicaragua y su homólogo ruso sobre «cooperación en el campo de la regulación legal de las actividades de las Organizaciones Sin Fines de Lucro (OSFL)».
