Luego de ser capturado por las autoridades policiales de Estados Unidos, el nicaragüense, y simpatizante del régimen orteguista, Roberto Ramiro Aguilar Monjarrez fue acusado por dos cargos relacionados con conductas lascivas contra un adolescente de 15 años, en la ciudad de Miami, Florida.
Aunque los medios de comunicación norteamericanos no detallan una fecha exacta para el juicio del acusado, afirman que Aguilar Monjarrez, de 41 años, deberá enfrentar sus dos delitos frente a un tribunal estadounidense.
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El doctor Richard Sáenz Coen expuso al medio de comunicación norteamericano CSB News Miami que él también fue «acosado políticamente» por el orteguista encarcelado. Añadió que no le sorprenden las acciones criminales de Aguilar, porque «el individuo tiene antecedentes como abusador sexual».
Sáenz comentó que varios exiliados nicaragüenses tienen la hipótesis de que Monjarrez «está haciendo algún tipo de trabajo para el régimen sandinista».
En su reportaje, CBS News Miami aseguró que el nicaragüense tiene una retención de inmigración, así como antecedentes penales en el condado de Orange, y que estas condiciones le podrían causar una deportación. Sin embargo, Sáenz advirtió que si Aguilar regresa a Nicaragua, «lo más probable es que sea liberado, dada su afiliación al régimen sandinista».
De igual manera, el médico relató al medio que el seguidor del régimen, en el año 2017, entró armado con machetes, e incluso con AK47 a uno de sus dominios. Aguilar Monjarrez fue «el dirigente de un colectivo de ‘supuestos’ trabajadores» que acusaron al doctor «ante los juzgados por ‘hacerlos trabajar en condiciones inhumanas’ y por ‘no haberles indemnizado’ después de cerrar la empresa TECNICA, S.A.», compañía en donde Sáenz fue presidente ejecutivo y accionista.
En una publicación realizada en su cuenta personal de X, Sáenz también denunció que un juez nicaragüense le confiscó la propiedad y, a partir de entonces, «comenzó una odisea hasta que la dictadura sandinista me dejó en la calle. Un total de más de 7.5 millones de dólares en bienes y activos me fueron confiscados, sin contar otros bienes heredados».
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¿Cómo se dieron los hechos?
De acuerdo a los reportes policiales, el 17 de noviembre de 2023, un menor de 15 años de edad entró al baño de una iglesia ubicada en Miami. El adolescente le compartió su número telefónico a un amigo que lo acompañaba, pues necesitaban enviarse una información. Sin embargo, ninguno de los dos jóvenes supo que Aguilar Monjarrez también escuchó su plática.
En cierto momento, el joven se quedó solo y, según el reporte policial, Aguilar, de 41 años, entró al baño y le realizó distintas preguntas respecto a su dirección personal y si él tenía novia. Después, el seguidor orteguista tocó el cuello y brazo del menor de edad quien, en respuesta al acoso, apartó la mano del hombre mayor y se encerró en un cubículo del baño. Aguilar también se metió a otro cubículo y el adolescente aprovechó para abandonar el lugar.
Al día siguiente, los padres del estadounidense reportaron el suceso a la Policía de Miami, debido a que el acoso de Aguilar continuó por medio de mensajes en WhatsApp. Durante la investigación, que inició después de la denuncia, un agente policial se hizo pasar por el joven para responderle al nicaragüense. Este último, a pesar de saber completamente que contactaba a un menor de edad, le escribió de manera lasciva y preguntó por sus hábitos sexuales, su cuerpo e incluso si podían ver pornografía por internet.
Finalmente, el cuatro de enero de 2024, la Policía de Miami detuvo a Roberto Ramon Aguilar Monjarrez, acusado de cometer el delito de acoso. De acuerdo a los reportes preliminares, el nicaragüense no tendrá derecho a una fianza.
Roberto Aguilar es originario de Chichigalpa y fue profesor en el colegio Gilberto Ramírez. Es acusado por distintos expresos políticos de ser un «testigo falso» del régimen para condenar a sus opositores. El exreo de conciencia Gerson Snayder Suazo detalló que Aguilar «estuvo en la silla de testigos falsos del régimen que me acusaron por distintos delitos». «A su vez, el seguidor orteguista señaló mi hogar para que ‘abrieran fuego’», sostuvo.