La vicedictadora de Nicaragua, Rosario Murillo, anunció que su régimen enviará a «convivencia familiar» a 500 reos comunes que están detenidos en diversos centros penitenciarios del país, pero mantiene en prisión a más de 90 personas presas políticas, sometidas a tratos crueles, inhumanos y degradantes, según denuncias de organismos locales e internacionales.
En su alocución por los medios oficialistas, Murillo detalló que las excarcelaciones se ejecutarán este próximo sábado, 14 de octubre, por la celebración del 44 aniversario de fundación del Ministerio de Gobernación (Migob).
«Nuestro Ministerio de Gobernación, el 17 (de octubre) celebra su aniversario número 44, y lo celebra también con actos de beneficios legales de convivencia familiar para 500 hermanos y hermanas que están todavía al día de hoy en las cárceles, porque el día sábado será el acto de recibimiento del beneficio legal de convivencia familiar», dijo la vocera gubernamental este mediodía.
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Rosario Murillo subrayó que el otorgar este beneficio a los reos comunes es la «mejor manera de celebrar este aniversario. Un acto de solidaridad y de fortalecimiento de valores».
Además, recordó que «el otro día veíamos un reportaje en RT, la televisión de la Federación de Rusia, un reportaje sobre todas las clases, todos los cursos, todo el trabajo que se realiza en los distintos sistemas penitenciarios para poder garantizar que luego de actos como este que devuelven a las familias a sus seres queridos, se puedan dedicar al trabajo, al bienestar de sus familias, de sus hogares».
«Las personas que han estado en las distintas intendencias del sistema penitenciario, desde la familia y con la capacitación, la experiencia y el conocimiento adquirido y la experiencia de vida sobre todo para no volver a cometer errores; se incorporen no solo a la productividad, sino también al desarrollo de una ciudadanía cada vez más sensible, solidaria, familiar y por supuesto estudiada, con capacidad para caminar hacia el futuro», agregó.
Hasta mayo de 2023, la dictadura había liberado al menos a 3,930 reos comunes, a este dato se le sumaría la próxima excarcelación de 500 presos más que serán puestos en libertad antes de cumplir sus respectivas condenas.
En los distintos sistemas penitenciarios del país permanecen encarcelados más de 90 presos políticos, a los que el régimen no incluye en las excarcelaciones.
Además, este beneficio de convivencia familiar que otorga el régimen sandinista a reos comunes ha sido fuertemente criticado por organizaciones feministas, como la Red de Mujeres contra la Violencia, bajo el argumento que tras esos beneficios hay un incremento de femicidios y de la delincuencia en general en Nicaragua, por que los «premiados» por Ortega salen a comentar delitos, entre ellos femicidios.