La Policía, al servicio del régimen de Daniel Ortega, allanó sin orden judicial la casa de la hermana de la joven opositora Adela Espinoza Tercero, egresada de la carrera de Comunicación Social, en la Universidad Centroamericana (UCA), secuestrada el sábado, 19 de agosto, en presencia de su familia, incluyendo sus dos hijos menores.
El Movimiento Defensa Estudiantil UCA denunció, a través de su cuenta de Twitter, que el cateo a la casa de la hermana de Espinoza Tercero fue a las nueve de la mañana de ayer domingo.
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Aseguran que los agentes policiales se llevaron aparatos electrónicos, entre los que están Tablet, computadora y teléfono celular. Además denuncian que la acción fue ejecutada en presencia de una menor, hija de la hermana de la joven opositora detenida.
«Exigimos se respete la propiedad privada e integridad de los familiares de Adela Espinoza Tercero», demandó la organización opositora, sin dar detalles de la situación actual que atraviesa la egresada de la UCA.
Artículo 66 intentó comunicarse con familiares y cercanos de la Adela Espinoza, quien cumple más de 48 horas de detención, sin embargo no se pudo establecer contacto. Hasta el momento se conoce, de forma extraoficial, que la joven está detenida en la estación policial del Distrito Tres, en Managua.
Según información de organizaciones estudiantiles, la Policía no dio mayor explicación sobre los motivos del allanamiento y captura de Adela Espinoza, originaria del barrio El Recreo, de la capital.
Dos secuestros en un mismo día
Horas después de la detención de Adela Espinoza, se conoció del secuestro de la joven universitaria Gabriela Morales López, estudiante de la Universidad Juan Pablo II, de Managua, convirtiéndose en la segunda persona en ser secuestrada por la Policía.
Una fuente rebeló a este medio de comunicación que la institución policial anda tras la pista de un grupo de personas, hasta ahora no identificadas, que la tarde del viernes, 18 de agosto, realizaron una protesta quemando una bandera roja y negra, del partido gobernante Frente Sandinista.
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La arremetida de la dictadura se hizo luego de la confiscación de la UCA y la inauguración de la Universidad Nacional Casimiro Sotelo, inventada por el orteguismo para adjudicarle los bienes robados a la institución educativa jesuita.
Por su parte, el Movimiento Universitario 19 de Abril (MU19A) se solidarizó con las jóvenes secuestradas y exigió se respete su integridad física y sean puestas en libertad. De ser procesadas las dos opositoras, engrosarían la lista de más de 60 presas y presos políticos en Nicaragua.