haLa tasa de desempleo en Nicaragua cerró en 2022 con 2,6 %, según las cifras del Banco Central de Nicaragua (BCN), un 0,9 % menor a la del año anterior que cerró 3,5 %. A pesar de estas cifras que apuntan como positivas, una gran cantidad de nicaragüenses continúa operando bajo el empleo informal.
«Al cierre de diciembre 2022, la tasa de desempleo se ubicó en 2,6 %, 2,2 puntos porcentuales inferior a la observada previa a la pandemia (primer trimestre de 2020). El subempleo se redujo hasta 38,3 %. Es decir, según los datos oficiales, la tasa neta de ocupación en Nicaragua cerró en 97,4 %, 0,9 % puntos porcentuales más que a diciembre de 2021 (96,5 %)», refirió el presidente del Banco Central nicaragüense, Ovidio Reyes.
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Según el economista nicaragüense Néstor Avedaño, la población económicamente activa (PEA) es un dato que no ha sido actualizado y que se calcula en un 53,8 % de la población total de Nicaragua, estimada en 6,73 millones de habitantes, según datos del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide). En base a estos números, de los 3,62 millones que componen la PEA, 3,52 millones tiene un empleo o subempleo en Nicaragua, explica en su blog personal
El economista refiere que el 38,3 % de subempleados son personas que trabajan menos de ocho horas diarias, tal como lo establece el Código Laboral, o devengan un salario menor que el salario mínimo legal, lo cual es prohibido por la ley.
Según la información oficial, la afiliación al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) aumentó en 13 % de trabajadores en 2022. «La tasa de empleo formal se ubicó en 24 por ciento de la población ocupada, aumentándose, mientras que la tasa de subempleo se redujo al 38.3 por ciento. Por el lado de la afiliación al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), el número de afiliados alcanzó 783,384 en diciembre de 2022», explicó Reyes.
El empleo informal continúa ocupando un espacio importante en las estadísticas, sumado al aumento de la canasta básica que ahora ronda los C$18,845.78 córdobas, es decir US$518.17 dólares, superando la percepción del salario mínimo.
Al inicio de su presentación, el Presidente del BCN expresó que la economía continuó registrando una evolución económica positiva, con crecimiento de la actividad económica y del empleo. «Podemos afirmar con seguridad que los fundamentos de la economía se han podido preservar y, por lo tanto, se ha afianzado la continuidad de la bienandanza económica precedente que se vio interrumpida transitoriamente por perturbaciones internas y externas como la generada por la pandemia del COVID-19 y el impacto de los huracanes», refirió el funcionario.
Asimismo, el titular del BCN afirmó que «la inflación en 2022 se ubicó en 11.59 por ciento debido a que los precios domésticos continuaron presionados al alza por factores externos. En medio de un conjunto de resultados económicos positivos a nivel doméstico, el país ha tenido que enfrentar el fenómeno inflacionario global, el cual se ha traspasado a los precios nacionales, haciendo que la inflación nacional sea principalmente de naturaleza importada. Las principales economías del mundo presentaron en 2022 elevados precios derivados de la pandemia del COVID-19».
Los datos oficiales se muestran optimistas y afirman que Nicaragua se encamina hacia su tercer año de recuperación económica y pronosticando que, a mediano plazo, la economía crecerá un mínimo de 4 % anual. En 2023, el Gobierno prevé un crecimiento de entre 3 % a 4 % de su economía, con una inflación de entre 5 % a 6 %.