De cinco porciento será el ajuste salarial para los trabajadores del Estado en este 2023, así lo informó la vicepresidente de Nicaragua, Rosario Murillo, durante su alocución de este viernes, 20 de enero, a través de sus medios de propaganda.
La portavoz del gobierno orteguista detalló que el sancionado ministro de Hacienda y Crédito Público de Nicaragua, Iván Acosta, dio a conocer que el ajuste se hará efectivo a partir del pago de salario del mes de febrero.
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El aumento, según la vicedictadora se hizo «como ha estado establecido para todos los servidores públicos, (…) esto tanto en los ministerios, como en otros poderes del Estado», apuntó.
«Son 40 mil en salud, 64 mil en educación, 51 mil en educadores en todas las modalidades (…) Se está garantizando que —los trabajadores— reciban el incremento de este cinco porciento», detalló la esposa del dictador Daniel Ortega.

Indicó además que el precario monto que implica el ajuste salarial es de un mil 600 millones de córdobas; y según asegura está «proyectado y sostenido en el Presupuesto General de la República.
El anuncio del régimen de Daniel Ortega llega un día después —19 de enero— que se instaló la denominada Mesa Tripartita del Salario Mínimo, compuesta por los sectores estatal, empresarial y sindicatos, con el objetivo de evaluar un posible ajuste al sueldo básico en el país centroamericano.
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En 2022 las partes acordaron un aumento del salario mínimo del 7 %, que ubicó el sueldo básico de Nicaragua en 6.978,34 córdobas, que en febrero de ese año, fecha en que se aprobó, equivalía a 196,13 dólares y hoy representan 192,45 dólares, por la devaluación.
En dichas negociaciones el sector privado había propuesto un incremento del 4,25 % al salario mínimo, a la vez que los sindicalistas, que suelen ser aliados del Gobierno nicaragüense, no divulgaron sus pretensiones.

Por mandato de ley, las partes deben llegar a un acuerdo de salario mínimo a más tardar el 28 de febrero de cada año, y posteriormente definir un nuevo ajuste al 31 de agosto.
En la actualidad, el salario mínimo en Nicaragua —el segundo país más pobre— equivale a cerca de un tercio del costo de la canasta básica, según datos del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide).
En 2023, el Gobierno de Nicaragua prevé un crecimiento de 3 % a 4 % de su economía, con una inflación de 5 % a 6 %, sin embargo estas proyecciones se ven «opacadas» por la crisis política que vive el país y el alto flujo migratorio desde el 2018, que el año pasado incrementó en gran medida.