Los dirigentes empresariales y presos políticos Michael Healy y Álvaro Vargas, presidente y exvicepresidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), respectivamente, cumplen este viernes, 25 de noviembre, 400 días desde que fueron tomados rehenes de conciencia por la dictadura Ortega-Murillo.
La justicia orteguista condenó a Michael Healy a 13 años de presidio por los supuestos delitos de «menoscabo a la integridad nacional» y a nueve años de cárcel a Álvaro Vargas por «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional».
El juez Ángel Jeancarlos Fernández González, del Juzgado Cuarto Distrito Penal de Managua, fue el que emitió las condenas contra los dos opositores.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó al juez Fernández por «socavar procesos democráticos o instituciones cuando condenó y sentenció a líderes prodemocráticos por cargos falsos.
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Este mismo juez también condenó al empresario Luis Rivas Anduray; a los opositores Dora María Téllez, José Antonio Peraza y Víctor Hugo Tinoco.
Después de un año preso, Healy fue presentado ante los medios de propaganda de la dictadura el 30 de septiembre de este año. En las imágenes divulgadas se ve bajo de peso y luce casi irreconocible y con su rostro decaído. Un día después fue presentado Álvaro Vargas, el preso político mostraba una notoria pérdida de peso.
Michael Healy y Álvaro Vargas fueron detenidos el 21 de octubre de 2021. Healy fue citado a la Fiscalía para una «entrevista» en el caso de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides). Ese mismo día fue detenido minutos después de rendir declaración ante las autoridades orteguistas. Mientras que Vargas fue capturado en su vivienda.
Los empresarios guardan prisión en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como «El Nuevo chipote», un centro donde reciben tratos crueles, inhumanos y degradantes, según denuncias de organismo de derechos humanos y familiares de los rehenes de conciencia.