La Asociación Mundial de Radios Comunitarias de América Latina y el Caribe (AMARC ALC) rechazó el cierre arbitrario de su asociada nicaragüense Radio Vos, que operaba en Matagalpa, en el norte del país. La organización también se sumó a las condenas ante las cancelaciones de las radios de la Diócesis de Matagalpa y se solidarizaron con las audiencias porque «ya no tendrán estos espacios para informarse».
AMARC destaca que Radio Vos era una emisora comunitaria con 18 años de trabajo junto a las comunidades del departamento de Matagalpa y que ha sido relevante para la promoción de los derechos humanos, especialmente de la mujer, juventud y niñez.
«Este martes 2 de agosto la emisora recibió una notificación de cierre por parte del Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correo, Telcor, bajo el argumento de supuestos problemas técnicos que en la práctica no existen… El cierre no solo afecta el derecho quienes laboran en la emisora, sino que limita a la población para que goce del derecho fundamental a la comunicación», enfatiza la organización.
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AMARC exhortó al régimen Ortega Murillo para que «revierta estos cierres administrativos que violentan la libertad de expresión, la libertad de prensa y el derecho a la comunicación… Una democracia solo puede construirse sobre la base del respeto a los derechos de la ciudadanía, entre los cuales se encuentra la comunicación como derecho fundamental».
A través de un pronunciamiento, Radio Vos informó que una delegación de Telcor llegó a sus instalaciones acompañada por la Policía para realizar una supuesta «revisión» de los equipos de transmisión de la emisora, tanto en las instalaciones como en La Cartuja donde opera el transmisor. «Después de la supervisión, nos notificaron la cancelación de nuestra licencia de transmisión en frecuencia modulada 101.7 FM», escribió la radio.
De acuerdo con el pronunciamiento, Telcor justificó la cancelación de la licencia de la radio por haber incumplido con el artículo 41 de la Ley de Número 200 «Ley General de Telecomunicaciones y Servicios Postales» , el cual establece que «las estaciones de radio no podrán suspender sus transmisiones, salvo caso fortuito o fuerza mayor, debiendo informar el titular de la licencia, sobre la suspensión indicando usted las causas y la normalización del servicio».
Ese mismo día, dos de agosto, la dictadura orteguista también ordenó el cierre del Canal RB3 en Río Blanco, municipio de Matagalpa, en medio de la ola represiva contra la Iglesia católica en Nicaragua. Esta ofensiva también alcanzó a siete radios religiosas que eran administradas por la Diócesis de Matagalpa, cuyas licencias también fueron suspendidas por Telcor.