Al menos 8 personas han muerto y otras 12 han resultado heridas en la madrugada de este martes como consecuencia de un ataque aéreo con misiles del Ejército ruso en la región de Chernígov, en el norte de Ucrania y cerca de Kiev.
El bombardeo afectó a la aldea de Desna, en la citada región, que ha sufrido varios ataques rusos durante los últimos días, informó el medio ucraniano Hromadske, que cita como fuente a la Dirección General del Servicio Estatal de Emergencia en Chernígov.
La publicación recordó que alrededor de las 5:00 hora local (02.00 GMT), la aviación rusa disparó cuatro cohetes sobre la aldea de Desna y dos de ellos impactaron en un edificio.
También en la región de Sumy, en el noreste del país, los rusos han efectuado hoy ataques contra varias localidades limítrofes con Rusia, según publicó el Comando Operativo “Norte” de Ucrania en su página de Facebook.

En este caso, no se ha informado de la existencia de víctimas.
Rusia asegura haber destruido armas de EU y de Estados Unidos
Las Fuerzas Armadas de Rusia destruyeron con misiles de crucero de largo alcance “Kalibr” en la región de Leópolis armamento y equipamiento bélico enviado a Ucrania por Estados Unidos y la Unión Europea, según informó hoy el Ministerio de Defensa ruso.
“En las cercanías de la estación ferroviaria de Starychi de la región de Leópolis fueron destruidas con misiles de largo alcance y alta precisión unidades de reserva ucranianas y partidas de armamento extranjero y equipamiento bélico de EEUU y países europeos”, señaló el alto mando ruso en el parte de guerra matutino.
Según el portavoz de Defensa, Ígor Konashénkov, se trataba de armamento preparado para su envío a la región del Donbás.
“Además, fueron destruidas unidades de reserva del enemigo que preparaban su instrucción en centros de entrenamiento en las localidades de Ajtirka, región de Sumy, y Desna, región de Chernígov”, añadió el general ruso.
Además, el Ejército ruso atacó con misiles dos puestos de mando y un centro de comunicaciones, 28 zonas de concentración de militares y equipamiento bélico, y dos arsenales con municiones en las localidades de Ugledar y Konstantínovka, en la región de Donetsk.
“A consecuencia de los ataques fueron aniquilados más de 470 nacionalistas y destruidas 68 unidades de equipamiento bélico”, indicó Konashénkov.
En su empeño por frenar la posible llegada de armamento de Occidente al frente, el Ejército ruso destruyó una subestación eléctrica en la estación de trenes de Merefa, en la región de Járkov, con lo cual impidió el funcionamiento de los trenes eléctricos en esa dirección.