El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, calificó de «arbitrarias e injustas» las sentencias de cárcel dictadas a los presos políticos en Nicaragua. El delegado de la entidad continental demandó al régimen de Daniel Ortega «desmantelar» el sistema de represión y tortura impuesto a los reos de conciencia.
En un comunicado con fecha del cinco de abril, el funcionario indicó que «los presos políticos han recibido, recientemente, condenas de 8 a 13 años de reclusión, todas arbitrarias e injustas, impuestas a ellos por ejercer su derecho a la protesta y a varios por ejercer su derecho a participar en política, es decir, a elegir y ser elegidos».
Informó que sostuvo una reunión con Berta Valle y Jared Genser, esposa y abogado del preso político Félix Maradiaga, respectivamente. Durante el encuentro conversaron sobre las condiciones inhumanas en las que permanecen las personas presas políticas en Nicaragua.
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Luis Almagro denunció que Ortega no le permite a los reos de conciencia «recibir visitas con la frecuencia que marcan los estándares internacionales en la materia. En el caso de Maradiaga, ha recibido solo una visita en los últimos 55 días».
«Los presos políticos no tienen suficiente acceso a la luz solar. No tienen acceso a material de lectura alguno, ni a elementos de escritura. No reciben correspondencia. No reciben atención médica adecuada, a veces no la reciben en absoluto. Y la alimentación es insuficiente, con lo cual todos han experimentado una pérdida de peso que pone en riesgo su salud», continuó.
Subrayó que en el caso de Maradiaga Berta Valle tiene pruebas y constancia «de malos tratos recibidos, lo cual ha contribuido al deterioro de su condición física y psíquica».
El secretario general de la OEA le exigió «al régimen nicaragüense desmantelar este verdadero sistema de represión y tortura» en perjuicio de los presos políticos.
«Estas violaciones de los derechos humanos ameritan la intervención de la justicia internacional a efectos de poder llevar adelante una investigación competente, dirimir responsabilidades y administrar reparaciones», advirtió.
Además, hizo un llamado a la comunidad internacional a «aumentar la presión diplomática» sobre la dictadura de Ortega y «multiplicar las muestras de solidaridad con los presos políticos y sus familias».