La Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó este jueves, 31 de marzo, la creación de un mecanismo que permita la rendición de cuentas a las víctimas de las violaciones a los derechos humanos cometidos por el régimen de Daniel Ortega desde abril de 2018 en Nicaragua.
El defensor de derechos humanos, Paulo Abrão, celebró esta aprobación en el Consejo de Derechos Humanos como una «tremenda victoria de la sociedad civil de Nicaragua, ¡fue aprobado el Mecanismo para Nicaragua!. Un Grupo de Expertos Independientes de la ONU que investigará las violaciones de derechos humanos desde 2018, hacer recomendaciones y enganchar esfuerzos de diálogo», manifestó el experto.
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La resolución «Promoción y protección de los derechos humanos en Nicaragua» que manda a crear dicho mecanismo fue aprobada con el voto favorable de 20 países, siete en contra y 20 abstenciones. Esta propuesta contó con el voto en contra de los países aliados de Daniel Ortega: Venezuela, Rusia, China, Cuba, Honduras, Bolivia y Eritrea. Ucrania votó a favor de la adopción del mecanismo para Nicaragua.
Por su parte, Héctor Mairena, integrante del Consejo Político de la Unidad Nacional Azul y Blanco (Unab), agradeció el apoyo a «la resolución que ha tomado el Consejo de Derechos Humanos en relación a Nicaragua. La resolución en sus considerandos, retrata lo que ocurre en Nicaragua y expresa la preocupación de la comunidad internacional en relación a las restricciones a la democracia, la desaparición de los espacios democráticos, la situación de los presos políticos y las últimas medidas coercitivas de la dictadura contra distintas organizaciones de la sociedad civil».
Ante esta situación añade que «la resolución contiene un acuerdo en particular que es la constitución de un mecanismo definido por la Alta Comisionada de Derechos Humanos y un grupo de expertos que diagnosticará y establecerá constatando la situación de de derechos humanos. Desde ahora demandamos a la dictadura que permita el ingreso a nuestro país de este trío de expertos», señala el activista.
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«También la resolución se refiere a la necesidad que el régimen de Ortega permita el ingreso a Nicaragua de distintas instancias de derechos humanos, lo cual hasta ahora Ortega ha impedido. Esta resolución confirma una vez más que la comunidad democrática, los países democráticos están pendientes de lo que pasa en Nicaragua y emplaza otra vez a la dictadura a respetar los derechos humanos a restituir la democracia», finalizó Mairena.
La creación de este Mecanismo es un petición encabezada por el Colectivo 46/2, un grupo de 22 organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales que desde el año pasado visibilizan que el Estado nicaragüense no ha cumplido con ninguna de las recomendaciones de la Resolución 46/2.
Esta petición cuenta con la recomendación de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), Michelle Bachelet, que insta al Consejo de Derechos Humanos de la ONU a considerar «todas las medidas a su alcance para promover la rendición de cuentas por las graves violaciones que han ocurrido» en el país desde la rebelión cívica.
