La Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN) afirmó que su presidente y líder opositor, Max Jerez, «enfrentó con entereza y firmeza» el juicio político en su contra. Este viernes, 11 de febrero, en las instalaciones de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como «El Nuevo Chipote» en Managua, el joven enfrentó su proceso judicial.
En un comunicado divulgado en redes sociales, la organización resaltó que el dirigente estudiantil al igual que Lesther Alemán «se dio cuenta de que tenía juicio hasta que entró a la sala».
De acuerdo con AUN, durante la audiencia, Jerez manifestó que «la historia nos enseñará el lugar donde nos corresponda estar. Con dignidad y honor asumo este reto en prisión, porque todo cambio tiene sacrificio».
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Al presidente de la organización opositora, el Ministerio Público lo declaró culpable por supuestamente «conspirar para cometer menoscabo a la integridad nacional» y solicita 13 años de cárcel, mismos años en prisión que le impusieron a Lesther Alemán.
La parte acusadora estuvo a cargo de la fiscal Andrea Salas y la condena por la jueza del Segundo Distrito Penal de Audiencia de Managua, Nadia Camila Tardencilla Rodríguez. Las acciones de ambas funcionarias obedecen a los «designios» del régimen de Ortega-Murillo, enfatizó AUN.
Max Jerez y su lucha por los derechos humanos
En el pronunciamiento, la organización resaltó el intelecto, el compromiso y la solidaridad del joven opositor por ayudar a los demás. «Desde su niñez, Max Jerez ha estado comprometido con los derechos y el bienestar, en especial de los más pobres y vulnerables», dice la nota.
«En su barrio lo llamaban el “profesorito” porque siendo apenas un niño impartía clases de música a otros niños. También se destacó en la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli) cuando el Consejo Nacional de Universidades (CNU) lo condecoró como unos de los mejores estudiantes de Nicaragua», subrayó AUN.
El dirigente estudiantil se unió a las protestas antigubernamentales en abril 2018 por su «compromiso con los demás», señaló el organismo. Jerez participó en los «intentos» de diálogos con el régimen de Ortega en mayo-julio 2018 y marzo-mayo 2019.
AUN cataloga de «farsa judicial» el proceso en contra de Jerez. El joven opositor, este viernes, está cumpliendo 221 días desde que fue detenido arbitrariamente en una casa de «seguridad».
«A Max Jerez se le han violado todos sus derechos de manera sistemática. Sin embargo, sigue con la frente en alto y mandándonos mensajes de esperanza y fuerza. Max nos ha dicho que no tengamos miedo y que alcemos la voz contra esta dictadura que se cree dueña de Nicaragua», indicó la organización opositora.
