El historiador y escritor político mexicano Enrique Krauze espera que el nuevo presidente de Chile «no caiga en la izquierda dictatorial y populista que prolifera en América Latina» empezando por Nicaragua, Cuba y Venezuela. Krauze espera que Gabriel Boric se aleje de Daniel Ortega y no siga el juego de su dictadura.
«Pero también quisiera que esa nueva izquierda, que podría representar Boric y su generación, tomara distancia de la izquierda populista en América Latina. No es solamente Castro, la dinastía de los Castro, o Nicaragua, porque ahí no hay populismo, ahí hay dictadura pura y dura, igual que Maduro», expresó el reconocido escritor mexicano en entrevista al medio internacional La Tercera.
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Krauze ganador del Premio de Historia Órdenes Españolas quien ha dedicado obras y ensayos a la critica política aseguró que los países como Nicaragua y Venezuela han derivaron hacia la tendencia populista teniendo como referencia en la región a Cuba como si fuera «la meca religiosa de esa ideología mesiánica».
«El proceso de autocrítica que vivió la izquierda en Europa, en Italia, en España, en Francia, en Alemania, no lo tuvimos en América Latina y esa es la razón, una de las razones por las cuales la izquierda encontró esa mutación, ya no sólo dictatorial como Maduro o como Ortega, pero también populistas con tendencias claras hacia la dictadura como en México», continuó añadiendo Krauze.
Para el escritor el nuevo mandato de Boric debería de estar alejado de estas viejas políticas y crear una nueva izquierda que quite el sabor amargo que va dejando en América Latina. «Yo quisiera que Boric –y mira que estoy hablando de una nueva generación- de veras estudiara el siglo XX, se asomara al siglo XX. Tiene que escuchar la voz de los horrores del siglo XX para inaugurar una nueva izquierda en el siglo XXI», dijo.
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Asegura que «la mejor vacuna para evitar que Boric caiga en la demagogia populista de varios países de América Latina o en un régimen dictatorial como los que he reprobado ya, es aprender las lecciones de los horrores del siglo XX», caminos hacia los que conducen Daniel Ortega y Nicolás Maduro.
Nicaragua y Venezuela actualmente encabezan las listas internacionales en cuanto a las violaciones de derechos humanos, crímenes de lesa humanidad y la falta de democracia en las naciones en las cuales han instaurado «dictaduras totalitarias». La comunidad internacional recientemente demandó elecciones libres en Nicaragua, pero Ortega, en cambio, encarceló a más de 170 opositores y eliminó toda posibilidad de competencia.
