Decenas de mujeres nicaragüenses exiliadas marcharon el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres en San José, Costa Rica, denunciando los «crímenes de lesa humanidad, por maltratos físicos y tortura dentro de las cárceles» perpetrados por la Policía de Nicaragua a la orden de la dictadura Ortega-Murillo.
Las jóvenes, en su mayoría exiliadas desde el año 2018, exigieron la liberación de las presas políticas en el día contra la violencia hacia la mujer.
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«Nos encontramos en este país marchando por todas las mujeres que no pueden hacerlo en Nicaragua», dijo Amy Chávez, al sitio digital República 18.
La joven exiliada se reunió con sus compatriotas en el Parque Central y recorrió la marcha comprendida desde ese lugar hasta los Tribunales de Justicia costarricenses.
Tercer año que mujeres nicas marchan en San José
Esta es la tercera ocasión que las exiliadas nicaragüenses forman parte de las manifestaciones en contra de la violencia hacia las mujeres, demandando la liberación de todas las presas políticas que se encuentran en las cárceles del régimen.
También demandan la realización de elecciones libres, transparentes y justicia, en un país donde la violencia estatal cobró la vida de más de 355 personas desde abril de 2018, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
«Desde aquí en Costa Rica, estamos diciendo, libertad para las presas políticas, libertad para Nicaragua», agregó Chávez.
Las nicaragüenses llevaron fotografías de las presas políticas como Ana Margarita Vijil, Cristiana Chamorro, María Oviedo y también de la joven activista Cinthya Samantha Padilla Jirón.
Samantha es una joven originaria de Masaya que participó en las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega, quien estuvo exiliada en Costa Rica y decidió regresar a Nicaragua en 2020.
El pasado 9 de noviembre fue capturada en Managua por personas de civil, mientras se movilizaba en un automóvil por las cercanías del Hotel Holiday Inn.
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«Estamos demandando la liberación de Samantha Jirón y de todas las presas políticas en Nicaragua», expresó Claudia Vargas, colaboradora de Fundación Arias.
«Y estamos recordando que detrás de las presas políticas hay un montón de mujeres que demandamos su libertad», reiteró.
«Crímenes de lesa humanidad» en Nicaragua
Vargas también recordó que «no es la primera vez que el gobierno de Nicaragua se encuentra cuestionado por crímenes de lesa humanidad, por maltratos físicos y tortura dentro de las cárceles».
Ella se refiere a la denuncia realizada por 15 organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales que se refirieron sobre los «crímenes de lesa humanidad» que se cometen por el Estado nicaragüense.
Esta afirmación fue presentada en el Informe de la Verdad, Dictadura y Represión en Nicaragua: Lucha contra la Impunidad, a mediados del mes de noviembre de este año.
En Nicaragua guardan prisión más de 159 opositores al régimen de Daniel Ortega, de los cuales al menos 14 son mujeres, que fueron capturadas, en su mayoría, durante este 2021.
Algunas de ellas guardan prisión en la cárcel conocida como «El Nuevo Chipote» y sus familiares han informado que se encuentran en condiciones de salud deplorables y con bajo peso.