El Movimiento Universitario 19 de abril (MU19A) se unió a larga lista de organizaciones que rechazan el proceso electoral en Nicaragua, considerado una «farsa» preparada por Daniel Ortega y su esposa la vicemandataria Rosario Murillo. Aseguran que «el régimen eliminó el derecho a que los nicaragüenses pudiéramos elegir» y denuncia las anomalías presentadas en este contexto.
Los jóvenes afirman que «en Nicaragua no existe la igualdad de condiciones, se crearon leyes con la única finalidad de la persecución política de líderes en la oposición, no existió nunca la disposición de observación electoral internacional y nacional de forma imparcial y profesional, por el contrario, se cerraron todas las vías democráticas y se perdió por voluntad del régimen sandinista cualquier oportunidad de solucionar la ya profunda crisis política que atravesamos en el país».
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El organismo considera que los resultados que dan como ganador a Ortega con más de dos millones de votos son falsos, pues no se realizaron elecciones transparentes y observadas imparcialmente, pasando por encima de cualquier estándar internacional sobre elecciones generales, pues estas se dieron bajo un clima de encarcelación, represión e inhibición de partidos políticos.
La organización continúa exigiendo la liberación de los más de 150 presos políticos, justicia para las víctimas de la represión y el restablecimiento de la democracia en Nicaragua. La comunidad internacional también exige bajo estos términos que los Ortega-Murillo respeten los derechos humanos en el país.
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Organizaciones, presidentes y hasta empresarios internacionales se pronunciaron sobre lo sucedido en Nicaragua este siete de noviembre reprochándole a Ortega que ignoró por completo las peticiones de la comunidad internacional en el marco legal de acciones democráticas que rigen a cada país, por lo cual tildaron el proceso de «ilegítimo».
«No es posible reconocer a un gobierno emanado de unos comicios desarrollados en un clima de persecución política y afrenta a la libertad», expresaron recientemente empresarios guatemaltecos, añadiendo que lo que sucedió este domingo en Nicaragua «no representan la decisión libre del pueblo nicaragüense».