El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó los encarcelamientos de opositores por parte del régimen de Daniel Ortega y abogó porque sea el pueblo el que decida quiénes serán sus próximas autoridades en el Gobierno, a través de comicios libres y transparentes.
«Consideramos que se deben garantizar las libertades y que no debe haber represión en ninguna parte, ni en Nicaragua ni en Colombia ni en ningún país del mundo se debe optar por la fuerza. Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho», manifestó este viernes, 25 de junio, en una conferencia de prensa en el Palacio Nacional mexicano.
Después de semanas de mostrar una postura incierta sobre la crisis en Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU), López Obrador finalmente se refirió a la situación del país centroamericano justificando que su «política exterior les exige que no intervengan en asuntos de otros países», pero sí puede opinar sobre la defensa de los derechos humanos «de manera muy respetuosa».

Con base en ello, recomendó a Ortega «no encarcelar, que sea el pueblo el que de manera libre decida sobre las elecciones».
«Si se actúa de esa forma, garantizando la libertad plena, se impide a quienes están acostumbrados a intervenir en asuntos de otros países, el que tengan pretextos o excusas para entrometerse. Ojalá y en Nicaragua y en Colombia y en el Perú, también se resuelva por la vía pacífica y que se constituyan gobiernos democráticos, libres, con la legalidad y legitimidad suficiente, sean de la tendencia que sean», añadió.
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También resaltó que su gobierno es promotor de «tener en los órganos electorales a auténticos demócratas y no esos que son demócratas cuando les conviene», en referencia a los magistrados electorales de la región que, a veces, declaran un «fraude patriótico» cuando consideran que el ganador es un «peligro para el país».
«Que haya libertad para todos, democracia y que nadie se imponga por la fuerza», finalizó López.