La vicedictadora y vocera del régimen de Nicaragua, Rosario Murillo, se enredó más que otras veces en sus datos sobre la distribución de ayuda a los damnificados y según su versión, el Gobierno le habría entregado en promedio menos de dos láminas de zinc a cada familia de las que perdieron sus techos producto de los huracanes Eta e Iota que azotaron el Caribe y departamentos del norte de Nicaragua en la primera quincena de noviembre de este 2020.
En su comparecencia a través de los medios de comunicación bajo su control, Murillo, que acostumbra a mantener bajo estricto control la información estatal, dijo que su administración ha enviado hacia la zona afectada por los huracanes en total 351 mil láminas de zinc para beneficiar a las familias que perdieron sus casas o resultaron con sus viviendas dañadas.
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La segunda al mando de la dictadura, confundida con sus números, aseguró que con esas 351 mil láminas para techo habían beneficiado a un total de 288 mil 504 familias, es decir, eso representa un promedio de 1.2 láminas de zinc, en otras palabras, a cada familia le correspondería una lámina más un cuarto de otra, aproximadamente.
Murillo detalló además que aún están en calidad de evacuadas y en albergues 588 familias en diferentes lugares de Waspam y Bilwi, en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte (RACCN).
Información epidemiológica superficial
Como es costumbre en el gobierno de Daniel Ortega, los datos de la función pública se convierten en insumos privados y manejados al antojo de la portavoz gubernamental que no permite a los expertos brindar información a la ciudadanía sobre lo que ocurre en el país y en ese sentido, Murillo interpreta los documentos que le hacen llegar de forma rápida y superficial.
En la alocución de este lunes, 30 de noviembre, también mencionó que en cuanto al comportamiento de las «enfermedades epidémicas», por dengue se habían reportado 26 casos positivos, lo que representa siete por ciento menos, solo en la semana pasada.
En cuanto a la neumonía señaló que en ese mismo periodo hubo un 22 por ciento menos de casos, pero se dieron, según sus palabras, siete veces más de fallecidos. La vocera no especificó cuántos fallecidos representa.
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En referencia a a la malaria, la vocera de la dictadura afirmó que se registraron 629 casos, con un aumento del 25 por ciento con respecto a la semana anterior. En leptospirosis aseguró que hubo una disminución del 56 por ciento con relación al mismo periodo del 2019 y que no hay fallecidos por esta causa. No aclaró cuántos casos de esas enfermedad se dieron el año anterior ni en el presente, y terminó indicando que el Ministerio de Salud (Minsa) contabilizó un 97 por ciento menos en casos de influenza sin tampoco dar el detalle de casos.
Asimismo, en medio de la variedad desordenada de datos, sostuvo que ya están en proceso de distribuir un millón 200 mil juguetes e invitó a las familias a visitar los 50 altares que se erigieron en la Avenida Bolívar de Managua, en los que se invierten cientos de miles de córdobas que son descontados de las cuentas de las instituciones el Estado.