El párroco de la iglesia San Miguel Arcángel, en Masaya, padre Edwing Román reaccionó a los señalamientos de la primera dama y vicedictadora de Nicaragua, Rosario Murillo, quién tildó a los jerarcas católicos de emprender «llamados desde campanarios de odio».
A través de su cuenta de Twitter, el padre critico a la dictadura Ortega-Murillo respondió: «a propósito señora (Rosario) Murillo referente a lo que usted considera campanarios del odio: las campanas de nuestros templos salvaron vidas durante su represión del 2018…», en alusión a la matanza que desató el régimen por medio de oficiales de la Policía Nacional y grupos paramilitares, quienes asesinaron a más de 328 nicaragüenses, según el reporte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
A propósito Sra.Murillo, referente a lo que Ud considera “campanarios del odio”: las campanas de nuestros templos salvaron vidas durante su represión del 2018; que en su represión ha causado más de 500 víctimas mortales. El coronavirus a la fecha ha sido menos mortal.
— Edwing Román (@EdwingRoman14) May 15, 2020
Además, el jerarca comparó la matanza ejecutada por el régimen orteguista con la pandemia del COVID-19 y les refutó que «el coronavirus a la fecha ha sido menos mortal», pese a que el Estado intenta minimizar la pandemia para aparentar una «normalidad» y así no frenar las actividades promovidas por el Estado.
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El 14 de mayo, la vocera de la dictadura incluyó en su discurso de odio a los obispos nicaragüenses de la Iglesia católica. A raíz de la pandemia del COVID-19, los jerarcas han exhortado a sus feligreses a tomar las medidas de prevención ante el coronavirus y han criticado la falta de medidas implementadas por la administración orteguista.
«Haciendo llamados desde campanarios del odio y siendo parte de las pandemias de odio. Eso no se puede ocultar, el odio, la intriga y las ambiciones políticas que llevan a usar cualquier falsedad para sembrar cizaña», mencionó Murillo y posteriormente los calificó de «traidores y vendepatrias» en su alocución a través de los medios oficialistas.
Entre los jerarcas que se han pronunciado está monseñor Rolando Álvarez, de la Diócesis de Matagalpa; monseñor Jorge Solórzano, de la Diócesis de Granada; y el mismo cardenal Leopoldo Brenes, quienes también cancelaron misas presenciales y fiestas patronales, por lo cual, el régimen montó sus propias procesiones pasando por encima de la Iglesia.
La locura es el premio de quienes se anamoran perdidamente del poder, por la ambición desmedida por los bienes materiales mal habidos producto de la corrupción. Toda la familia Ortega-Murillo están locos, ni uno sólo está cuerdo. Zoilamerica se salvó por la depravación de su madre y el trompudo.
La comunidad internacional y los organismos internacionales deberían de declarar al gobierno sandinista:NO ACTO PARA GOBERNAR,es obvio que este gobierno guía hacia un despeñadero al pueblo Nicaragüense,ha cometido las estupideces más sobresalientes del mundo,ha demostrado una soberbia y una autosuficiencia que raya en la demencia,la pareja presidencial y,muchos de sus seguidores y funcionarios se hicieron ricos a la sombra del poder como consecuencia de actos de corrupción, además se volvieron criminales,represivos y verdugos de la nación,como puede un gobierno así representar y conducir a Nicaragua.
Una gran verdad