La zona de Camino de Oriente, el Colegio Teresiano y las nueve rotondas de Managua se encuentran tomadas por un fuerte despliegue policial. Los oficiales del régimen orteguista están armados y han sido trasladados en autobuses. Además, hay un amplio patrullaje en la capital tras el anuncio de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) de realizar una movilización para este sábado, 16 de marzo, con la cual pretenden exigir la liberación de todos los presos políticos.
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La guardia del régimen asedia estos puntos que han sido focos de resistencia ciudadana desde que iniciaron las protestas en contra de la dictadura en abril de 2018. Pese a que la Policía señaló que no autorizaba la marcha, los grupos opositores afirmaron que saldrían a las calles a ejercer su derecho constitucional.
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El Nuevo Diario realizó un recorrido por las diferentes zonas y comprobó que los oficiales están apostados para impedir que se lleve a cabo la movilización contra la administración de Daniel Ortega y Rosario Murillo. La Unidad Nacional Azul y Blanco convocó a esta marcha por considerar que es una burla que el régimen no libere a todos los presos políticos y que su estrategia lo único que busca es seguir dando largos para continuar en el poder.
Mientras los fanáticos de la dictadura se ubicaron en el Parque Japonés con las banderas del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) intentando vender un ambiente de alegría con tambores y bailes.