Las detenciones ilegales no han parado. Los jóvenes continúan siendo perseguidos y los padres demandando su libertad ante los organismos de derechos humanos de Nicaragua. El caso más reciente de ciudadanos apresados sin ninguna orden judicial es el de Ken Tórrez Arteaga, de 23 años, quien fue secuestrado por paramilitares cuando participaba en una caravana azul y blanco en Nindirí, Masaya, el pasado 20 de agosto.
Los padres de Ken Tórrez; Ana María Arteaga y José Javier Tórrez, se presentaron al Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) para denunciar el secuestro de su hijo. “A mi hijo lo secuestraron los paramilitares y la Policía en la caravana que iba hacia Nindirí, y cualquier cosa que le pase responsabilizo a la Policía”, dijo Ana Arteaga.
Ken es licenciado en administración de empresas, sus padres llevaron sus títulos que aseguraron demuestran que “no es un delincuente”. Los familiares de Ken Tórrez afirman que su hijo se encuentra en las instalaciones de la Dirección de Auxilio Judicial, mejor conocido como El Chipote.
Familiares piden libertad y respeto para el derechos de sus familiares detenidos
Al igual que en el caso de Ken Tórrez, otros ciudadanos nicaragüenses siguen su lucha en demanda de la libertad de sus familiares. Carlos Valle, padre de Elsa Valle, de 19 años y considerada presa política, denunció que a su hija la están maltratando psicológicamente y que sufrió una torcedura en su pie y no ha recibido atención médica. Ante esa situación, demanda que al menos le permitan ver a su hija para conocer su estado de salud.
Carlos Valle, igualmente, explicó que las compañeras de celda de su hija, entre ellas Irlanda Jerez, demandaron en la prisión la atención para Elsa Valle, pero su reclamo las llevó a ser castigadas en celdas de aislamiento. El padre de Valle también denunció que su hija ha sido torturada por las agentes de Auxilio Judicial, entre ellas; Angélica Samson, Violeta Roca, Daniela Flores, Fátima Mejía y Nil Velásquez.
Los padres de ambas personas detenidas ilegalmente por la Policía y paramilitares del régimen de Daniel Ortega demandan la libertad para sus hijos, ya que aseguran que su delito fue participar de las manifestaciones azul y blanco. “Él siempre ha ido a las marchas efectuando su derecho a expresarse, él no piensa igual al gobierno, porque este gobierno es un gobierno genocida. Es un gobierno que ha arrestado a muchos jóvenes, han matado a muchísimos jóvenes y yo exijo la liberación de mi hijo, porque mi hijo no es ningún delincuente, no es ladrón, es un hombre trabajador, honrado”, afirmó la madre de Ken Tórrez, quien responsabilizó al régimen de Ortega si le llega a pasar algo a su hijo, “cualquier cosa que le pase a mi hijo, yo responsabilizo a los paramilitares, a la Policía, y al gobierno de Daniel y la Chayo Murillo”.
Los familiares de Ken Torrez se han abocado al Centro Nicaragüense de Derechos Humanos para exigir un recurso de exhibición personal de su hijo, además, de demandar la libertad y respeto para sus derechos. Asimismo, el padre de Elsa Valle demandó que por lo menos se le permita a su hija la atención médica que requiere, que se le de le deje de torturar y que le permitan verla.
