El hasta ahora presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, en su discurso en el evento del 38 aniversario de la fundación de la Fuerza Naval del Ejército, intentó culpar a los manifestantes pacíficos de la crisis económica, social y política que enfrenta el país.
Ortega, el pasado 07 de agosto, envió a la Asamblea Nacional una reforma al Presupuesto General de la República para aplicar reducciones presupuestarias a los sectores salud, educación, transporte e infraestructura, esto fue justificado por la dirigencia del Frente Sandinista con la disminución que han registrado los ingresos del Estado, lo cual ha sido proyectado en, al menos, unos 7 mil 462. 3 millones de córdobas.
No obstante, Ortega niega su responsabilidad en la crisis que enfrenta Nicaragua, a nivel social, político y económico . Para el régimen orteguista los únicos responsables son “los golpistas”, que desde el pasado 18 de abril han marchado portando la bandera azul y blanco en demanda del respeto de sus derechos humanos y, en cambio, han recibido del Gobierno más represión y violencia, según los informes de organismos nacionales e internacionales, dedicados a la defensa y promoción de los derechos humanos.
En el marco de las protestas sociales en Nicaragua se han registrado entre 448 y 317 personas fallecidas, según las cifras de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), respectivamente.
Reducciones en salud, educación e infraestructura
Las reducciones que se darían, de ser aprobadas, por los más de 60 diputados orteguistas de la Asamblea, las reformas al Presupuesto General, serían para el Ministerio de Salud una disminución presupuestaria de 941 millones de córdobas, al Ministerio de Transporte e Infraestructura se le restaría 375 millones y al Ministerio de Educación sería de 1 395 millones de córdobas.
El régimen de Ortega aseguró que los programas sociales “no serían reducidos” sus presupuestos. Además, indicó que las disminuciones a salud, educación e infraestructura se efectuarían, en su mayoría, a proyectos que no habían sido licitados y a gastos administratvivos.
Las pérdidas económicas
Las pérdidas económicas a nivel nacional, registradas por el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, refieren que el sector privado tuvo que reducir al menos unos 68 mil empleos formales, específicamente, en el sector comercio.
Además, reportan que unos 8 mil 600 pequeños negocios dedicados al turismo tuvieron que cerrar. En total el sector turismo perdió unos 241 millones de dólares. Asimismo, el Ministerio de Transporte e Infraestructura reportó pérdidas económicas que ascienden a unos 9 millones, reflejados en unos 209 kilómetros de calles y carreteras fueron destruidas.
Aunque Ortega insiste en combatir la crisis económica en Nicaragua consiguiendo dinero y reduciendo presupuesto a las instituciones del Estado, expertos en economía y negocios como Juan Sebastián Chamorro, director ejecutivo de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social, han recomendado que Gobierno de Ortega y Rosario Murillo deben de dar una respuesta, primeramente, a las demandas sociales que le hace el pueblo nicaragüense en cuanto a libertad de presos políticos, cese de la represión gubernamental, adelanto de elecciones, justicia para los más 400 ciudadanos asesinados y democratización.
