La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) se vio obligada a cerrar «temporalmente» su cede central por las amenazas y hostigamiento del que aseguran son víctimas del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Algunos defensores tuvieron que salir inesperadamente del país, en varios casos, para proteger sus vidas de posibles atentados de muerte dirigidos por paramilitares. El defensor y abogado Álvaro Leiva tuvo que salir de Nicaragua hacia Costa Rica, por las constantes amenazas a las que ha estado expuesto por la labor que realiza como secretario ejecutivo en la ANPDH.
El cierre de las oficinas de la ANPDH se da, según el comunicado emitido por la organización, «tras recibir información alarmante sobre la activación de prácticas ilegales de persecución judicial y criminalización legal de los defensores de derechos humanos de la ANPDH».
Los defensores de derechos humanos detallaron que han sufrido asedio permanente de grupos paramilitares y amenazas contra las instalaciones por medio de llamadas telefónicas. Es por ello que decidieron prevenir cualquier ataque a sus colaboradores y defensores de derechos humanos.
La labor de recepción de denuncias los defensores de derechos humanos de la ANPDH, de ahora en adelante, la realizarán desde el correo electrónico [email protected] o a través del celular +505 8970 6482.
Los abogados defensores de derechos humanos de la ANPDH aseguraron, a través de su misiva, que continuarán ejerciendo su labor social de promoción y defensa de los derechos humanos.
La ANPDH ha realizado una exhaustiva labor humanitaria, principalmente, en el departamento de Masaya, donde la represión gubernamental ha golpeado con más fuerza. Los defensores nicaragüenses, en los ultimos tres meses, han realizado informes en los que reportan que la represión estatal hasta el momento, según la misma ANPDH, ha dejado más de 448 muertos en el marco de las protestas sociales.
Comunicado íntegro