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Las ciudadanas de Nicaragua que se dedican a la defensa y promoción de los derechos de las mujeres se unieron al paro internacional y declararon duelo, que empezará desde hoy primero, hasta el ocho de marzo, en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, con el fin de visibilizar el aporte de la mujer a la sociedad y exigir que cese de la ola de violencia desatada desde el inicio del 2018.
Las representantes de los movimientos feministas de Nicaragua: Hayzell Soza de la Red de Mujeres de Estelí, Eveling Flores de la Red de Mujeres Contra la Violencia, Ana Quirós del Centro de Información y Servicios de Asesoría en Salud (Cisas), Fátima Miñón, de Alianza de Centros de Mujeres; María Teresa Blandón, del Movimiento Feminista; Magaly Quintana, de Católicas por el Derecho a decidir y Martha Munguía, del Movimiento Autónomo de Mujeres presidieron la presentación en la que invitaron a los nicaragüenses a rendir tributos a las víctimas del femicidio, portando un lazo negro durante ocho días.
El paro internacional se creó por un evento de violencia contra la mujer en Islandia en 1976, pero desde el 2016 se ha venido impulsando a nivel internacional y, desde hace un año las organizaciones de mujeres de Nicaragua se unieron a la declaración de duelo internacional.
El próximo ocho de marzo las mujeres nicaragüenses se manifestarán desde los diferentes departamentos del país con una variedad de actividades. Las defensoras de los derechos de mujeres expresaron que las ciudadanas siguen sufriendo discriminación desde la sociedad y los gobiernos.
Parte de la discriminación identificada por los movimientos feministas se refiere a la desigualdad de los salarios entre hombres y mujeres, programas sociales reducidos, explotación de la fuerza laboral, condiciones extremas de explotación, falta de regulación del Estado de Nicaragua a las maquilas que contratan a mujeres bajo condiciones de trabajo inapropiadas, despojo de tierras, abandono del Estado a las mujeres de las comunidades del Caribe que soportan las manifestaciones del machismo “más bárbaro”, pocas posibilidades para denunciar la violencia y recibir respuestas de la justicia nicaragüense.
Para las representantes de movimientos que velan por la defensa de los derechos de mujeres, la situación de irrespeto hacia las ciudadanas “se ha agravado por la indolencia y la complicidad del estado”.
Los derechos de papel de la Ley 50-50 de Murillo
Los movimientos feministas rechazaron el incumplimiento de la ley cincuenta, cincuenta que divulga el Estado de Nicaragua a nivel internacional, ya que aseguraron que en las instituciones del Gobierno “los hombres son el monopolio”, por lo cual las feministas no ven de qué sirve “si no tienen el permiso para hablar o disentir, son diputadas de papel, son alcaldesas de papel, por eso este ocho de marzo vamos a hablar de nuestras propias verdades, vamos a hablar de la complicidad del Estado para discriminar el papel de la mujer”.
Las organizaciones defensoras de los derechos humanos han contabilizado en lo que en los dos primeros meses de 2018 a nueve mueres y una niña asesinadas solo por el hecho de ser mujeres, lo cual dejó como consecuencia 12 niños huérfanos del femicidio. A esto se le agrega los 13 intentos de asesinato vividos por mujeres que lograron salvarse de morir a manos de la violencia machista.
Las representantes de los diferentes movimientos feministas reprochan a las instituciones del Gobierno el hecho de que todas las muertes pudieron evitarse, “pero la Policía Nacional ni las otras instituciones hicieron nada para protegerlas (porque) no se aplica la ley por falta de voluntad institucional”.
Sin embargo, la sociedad tampoco es inocente, ya que las organizaciones también las señalaron de “indiferente”, puesto que ante tantos actos de violencia contra la mujer “permanecen pasivos”, por lo que llamaron a apoyar denunciando los abusos contra las mujeres y educando a la niñez, con respeto.
Las organizaciones de mujeres decretaron el duelo nacional durante ocho días para honrar la vida de las mujeres que no tuvieron la oportunidad de vivir al lado de sus hijos por la violencia machista que todavía impera en Nicaragua y por “la falta de respuesta del Estado nicaragüense ante esta barbarie”.
Además, del duelo nacional y del honor mediante una cinta negra las mujeres le demandaron a las instituciones del Estado de Nicaragua que “cumplan con su deber de actuar de manera expedita y eficaz, para proteger la vida de las mujeres de todas las edades. Respondiendo, atendiendo sus denuncias y castigando a los femicidas”.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]